Mandy Amanda Morales, de 31 años, era ayudante de un docente en San Dimas, al noreste de Los Ángeles. Fue arrestada, pero pagó US$ 50 mil de fianza y está libre
La educadora hispana, ayudante de maestro, fue detenida ayer tras comprobarse que había tenido un hijo con un estudiante de 16 años del centro educativo donde trabajaba. Las autoridades aseguran que el joven todavía sigue viendo al bebé aunque no hay noticia si las relaciones con la docente continúan.
El sargento Peter Hahn del Departamento del Alguacil del condado de LA., hasta el momento se desconoce si Mandy Amanda Morales ha tenido relaciones con otros menores del centro.
“Siempre existe una posibilidad de que haya más víctimas de las cuales no tengamos conocimiento”, advirtió el sargento Hahn.
Morales era ayudante de maestro en la escuela Canyon View, de enseñanza privada para estudiantes con necesidades especiales como dificultades de desarrollo y aprendizaje, que pertenece al Centro Infantil McKinley.
“La protección, el cuidado de la privacidad y la seguridad de los niños a quienes atendemos es nuestra más alta prioridad y continuaremos con nuestra cooperación con las autoridades para el cumplimiento de la ley”, afirmó en un comunicado dado a conocer hoy Al Mason, director ejecutivo del centro McKinley.
Los investigadores supieron del delito en diciembre, cuando un empleado de la escuela encontró un diario donde Morales detallaba la relación con el estudiante.
Las autoridades demoraron hasta ayer el arresto de la educadora, esperando los resultados de ADN que confirmaron que el bebé es hijo del estudiante.
Morales -quien se encontraba suspendida de su trabajo y renunció a su cargo la semana pasada- pagó una fianza de 50.000 dólares y se encuentra en libertad condicional.
A principios del mes, la profesora Laura Elizabeth Whitehurst de Redlands, en el condado de San Bernardino, también fue arrestada acusada de tener una relación sexual con un estudiante y haber tenido un bebé del joven.
En el 2012, el Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (LAUSD, en inglés) se vio plagado con cerca de una docena de casos de abuso sexual de profesores y empleados contra los estudiantes. Actualmente más de 40 familias cursan demandas contra el distrito escolar.