"En fechas tan especiales para nuestra comunidad, no puedo dejar pasar la oportunidad de llegar a cada uno de sus hogares para transmitirles mis deseos de esperanza y felicidad.
Quiero, anhelo, y deseo fervientemente que en cada uno de sus hogares no falte el alimento, que podamos compartir todos, desde nuestra humildad, vivir esta Noche Buena y Navidad rodeado de familiares y amigos que, sin dudas, son el mayor de nuestros tesoros.
Si hay algo que seguro hemos aprendido en estos casi 2 años de pandemia, es que pudimos adaptarnos a casi todo: el trabajo desde casa, las llamadas reiteradas en el día, evitar la aglomeración de personas.
Pero lo difícil, lo imposible, fue acostumbrarnos a la falta de abrazos y cercanía de nuestros seres queridos. Por eso, con responsabilidad, con mucho cuidado, volvamos a fundirnos en los brazos de quienes nos quieren y cuidan, volvamos a fortalecer esos lazos que no se rompen jamás, aún con distancia de por medio.
Volvamos a reir a carcajadas, a disfrutar de anécdotas sentados en el pasto de nuestro patio, a compartir lo poco o mucho que tengamos. Y fundamentalmente, volvamos a creer en ese Niño Jesús que hoy nace, y nos permite renacer a nosotros también.
Con fe, con alegría, y con amor, que esta Navidad llegue para iluminar nuestros corazones y que nos colme de bendiciones.