Alarma diplomática por un presuento vuelo no autorizado en la frontera con Chile
Las FFAA chilenas dicen haber detectado un avión en el Estrecho de Magallanes. El Ministerio de Defensa argentino lo niega. Se suma al conflicto por la instalación de unos paneles solares que el Ejército argentino debió retirar.
A dos meses del conflicto diplomático por la instalación de un panel solar en territorio chileno por parte de la Armada argentina, el Ministerio de Defensa de Chile volvió a encender las alarmas por una supuesta irrupción argentina sobre territorio chileno en el Estrecho de Magallanes, a partir de información que trascendió en medios trasandinos. Desde la cartera de Defensa argentina, a cargo de Luis Petri, informaron que el martes no hubo vuelos dentro del horario de alerta indicado por la cartera chilena ni tampoco requerimientos de información entre ambos países.
“Ayer, cerca de las veinte horas en la zona oriental del Estrecho Magallanes, existió una alerta de tráfico aéreo no identificado, ante lo cual nuestra Fuerza Aérea de Chile activó los protocolos, despegando los aviones F-5 en resguardo de nuestra soberanía", explicó la ministra chilena este miércoles sobre el episodio que trascendió anoche a través de las redes sociales.
El primer medio en levantarlo fue el trasandino BioBio, a partir de lo reportado por un usuario de la red social X, César Quezada (@cesar_quezada), quien alertó de una supuesta misión de intercepción real hacia la frontera con Argentina.
La ministra Fernández confirmó el hecho y explicó que en el vuelo de vigilancia los F5 de la Fuerza Área de Chile perdieron contacto con la supuesta nave que encendió el alerta, por lo que "se está llevando adelante una investigación”. "Lo que corresponde decir y para tranquilidad de toda la ciudadanía es que la Fuerza Aérea activó los protocolos y defendió nuestra frontera y soberanía como corresponde", buscó calmar los ánimos la ministra trasandina.
Fuentes del Ministerio de Defensa argentino aseguran que "en esa franja horaria no hubo vuelos de aviones argentinos, ni de militares ni de civiles" y que se enteraron del hecho por el posteo de la ministra de Defensa chilena. De la misma manera, confirmaron que no hubo ningún tipo de requerimiento por parte de las autoridades chilenas a Defensa, ni al área de Asuntos Internacionales, ni a la Fuerza Aérea.
La Fuerza Aérea informó oficialmente que la única actividad de vuelo que se ejecutó el día 27 de agosto fue un vuelo LADE con el sistema Twin Otter con las escalas y horarios que se muestran a continuación : Despegó de GAL (Río Gallegos) 12.00 hs.; Aterrizó en USU (Ushuaia) 13.40; Despegó USU 14.05; Aterrizo GRA (Río Grande)14.55; Despegó GRA 15.35 y Aterrizó GAL 16.55.
De acuerdo a los datos del Ministerio de Defensa de Chile, aproximadamente a tres mil pies entre el monte Aymond y el Estrecho de Magallanes se declaró esta alerta de violación de espacio y por eso se activó este protocolo. Frente a lo sucedido, se autorizó el despegue de dos aviones F-5 de la Fuerza Aérea de Chile (FACh) para hacer una supervisión en la zona, sin encontrar ningún aparato aéreo.
Paneles solares En junio pasado, otra intrusión en territorio chileno había escalado hasta incluso llegar a palabras del presidente Gabriel Boric. Se trató de la instalación de un módulo de paneles solares por parte de la Armada Argentina en las instalaciones del Puesto de Vigilancia y Control de Tránsito Marítimo (PVYCTM) HITO 1, lindante con el Puesto de Vigilancia Cabo Espíritu Santo, operado por personal de la Armada de Chile.
La Armada Argentina reconoció el error y accedió a retirar el módulo de paneles solares que habían sido inaugurados en abril como una donación de Fundación Mirgor, de la empresa de Nicolás Caputo, que aprovecha los beneficios impositivos de Tierra del Fuego para realizar autopartes, celulares y aires acondicionados.
La Armada dijo en un comunicado que distribuyó el Ministerio de Defensa que aquel accidente se debió a que “los paneles solares fueron instalados al norte de los módulos habitacionales, siguiendo el límite del alambrado perimetral" y por "error involuntario" uno de los paneles se colocó 3 metros dentro de territorio chileno.