Faltan dos semanas para que inicie el proceso de revinculación de la niña Cielo con su mamá. La jueza de Niñez, Karina Feldman fijó fecha para el 10 de febrero del 2025. Mientras tanto, la Justicia sigue sin responder a los reclamos de la familia de conocer el estado de Cielo y recuperar vínculo con su hermanita.
Desde el 17 de diciembre la niña Cielo se encuentra bajo la guarda de sus abuelos paternos por orden de la Jueza de Niñez, Adolescencia y Familia, Karina Feldman. Desde entonces, la familia materna reclaman conocer el estado de C ya que, en todo este tiempo, la niña no vio a sus amigos, no fue a cumpleaños de sus amigos, ni la llevaron a su colonia de vacaciones ni a las tardes de juegos a las que fue invitada. “Está aislada de todos y de todo”, afirmaron los padres de amigos de Cielo.
Los reclamos por ver a Cielo se hicieron públicos en medios de comunicación, en las calles a través de vigilias frente al Juzgado, marchas por la ciudad; pero también se hicieron reclamos judiciales ante el Juzgado de turno.
Las medidas fueron solicitadas por Juan Arregin, abogado de la mamá de C, quien reclamó la vinculación de la niña con su hermanita menor. También abuelos y tíos maternos hicieron presentaciones ante la Justicia. Pero ninguno de estos pedidos fue resuelto, entre ellos, el recurso de queja ante la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial de Resistencia que cuestiona la resolución que otorgó la guarda provisoria de Cielo a los abuelos paternos y el rechazo a la vinculación con la hermana de la niña, tampoco tuvo resolución judicial.
A la par, legisladores provinciales presentaron un pedido de Jury contra la Jueza Claudia Karina Feldman por considerar que no se dieron las condiciones para que Cielo eligiera con quiénes quería residir, y que, al momento del retiro de su domicilio fue forzada, lo cual incumple con normativas nacionales e internacionales en materia de derechos de las infancias.
También fundaciones, asociaciones, organizaciones, personas jurídicas y personas físicas, manifestaron el apoyo a este pedido de Jury. “La guarda judicial proteccional en favor de los abuelos paternos de la niña “C”, fue contraria a la voluntad de la niña, quien manifestó verbalmente como corporalmente, vulnerando de esta manera principios fundamentales del interés superior del niño, el principio de no discriminación, el derecho a la vida digna y desarrollo, y el derecho a ser oído, consagrados en la Convención de los Derechos del Niño de rango constitucional y en normativas nacionales y provinciales”, advirtieron en un comunicado de prensa.
CUESTIONAMIENTO SOCIAL “Me pregunto si los profesionales que la ven a C, indagan sobre qué le dicen a C cuando pregunta por su mamá, papá del corazón y amigos. Será que le cuentan la verdad? Que todos los días su mamá espera respuestas en el juzgado, que su hermana no sabe jugar sola y la busca, que sus amigos la esperan en cada paseo a la plaza, cada cumpleaños, cada juntada. Estos ‘profesionales’ se aseguraron que C no la convencieron de que sus afectos la olvidaron, o peor que ella no les importa. Porque realmente si no quisieran convencerla de tanta mentira C estaría libre y no cautiva”, escribió una allegada a la familia de Cielo.
Eso es lo que se cuestiona la sociedad que acompaña el reclamo. Todo el mundo entiende que hay cuestiones judiciales, conflictos entre adultos que deben resolverse, pero una niña no puede ser la única perjudicada y una jueza no debería decidir por sobre la voluntad de una niña que expresó con su voz, su llanto, sus gritos y todo su cuerpo que quería permanecer con su mamá.