Chiru, la nutria gigante que llega al Impenetrable para recuperar la especie
Chiru es un macho nacido en uno de los recintos de pre-suelta del Parque Iberá, Corrientes, donde también se lleva a cabo un proyecto de reintroducción de nutria gigante y donde habitó hasta alcanzar aproximadamente los 4 años de edad.
Ahora, este animal tiene una misión fundamental: contribuir a la recuperación del depredador tope del agua en la provincia de Chaco, donde, después de más de 100 años de extinción de la especie, solo se ha registrado la presencia de un ejemplar silvestre, Teuco.
Recientemente, Chiru fue trasladado al recinto de pre-suelta en el Parque Nacional El Impenetrable, donde convivirá con Rosario, una hembra proveniente del Zoológico de Los Ángeles (Estados Unidos). Juntos, seguirán perfeccionando sus habilidades para una futura vida en libertad y, con el tiempo, podrán formar una familia que contribuirá a la recuperación de la especie.
Gracias al trabajo conjunto de los proyectos de Chaco y Corrientes, así como a la colaboración de otras instituciones nacionales e internacionales, estamos cada vez más cerca del regreso de esta especie clave para los ecosistemas del norte argentino.
El lobo gargantilla (Pteronura brasiliensis), o nutria gigante, es la especie de nutria de mayor tamaño del mundo, pudiendo alcanzar una longitud de hasta 1,8 metros. Fue depredador tope de los ecosistemas acuáticos de toda sudamérica, donde se alimentó de peces y yacarés. Hasta mediados del siglo XX era posible avistarlo en el río Paraná. Se ha comprobado su presencia en los Esteros del Iberá en base a un cráneo hallado en una de sus islas.
La Coordinadora de Conservación de la Fundación Rewilding Argentina, Débora Abregú destacó que en 2021 se registró la presencia de una nutria gigante en el Impenetrable. Ese ejemplar silvestre fue bautizado con el nombre de Teuco. Después de un tiempo sin tener noticias suyas, a mediados de 2022 se hallaron huellas frescas en bancos de arena del río Bermejo, presumiblemente de este mismo ejemplar.
‘Debi’, que nació en Córdoba donde terminó la carrera de Biología, explicó que “desde su arribo al Impenetrable, Chiru convive e interactúa con Rosario, una hembra de siete años proveniente de un zoo de Los Ángeles, “cazando en forma conjunta, e incluso compartiendo los peces vivos que se introducen como alimento en su territorio. La interacción entre ellos es muy positiva. Eso nos da muchas esperanzas de que pronto esta pareja de nutrias gigantes dé a luz a los primeros cachorros en el Impenetrable chaqueño”, describió.
La bióloga destacó la importancia del proyecto, no solo desde el punto de vista de la conservación, también lo hizo desde el punto de vista del desarrollo comunitario: “sería fundamental que se conforme un grupo familiar antes de ser liberados. El próximo paso es esperar que esta hembra quede preñada y que nazcan lo primeros cachorros en el Impenetrable, donde estamos dando un paso más en la recuperación de esta especie que es tan importante para el equilibrio de los ecosistemas acuáticos; y que a su vez brindan una oportunidad muy grande a las comunidades vecinas, que se verán beneficiadas con el ecoturismo y las actividades de observación de fauna”.