La Defensoría presente en Congreso sobre Educación Inclusiva
El encargado del área de discapacidad de la Defensoría del Pueblo del Chaco, José Guiggia, participó del Congreso Regional Internacional de Inclusión Educativa que se realizó en la ciudad de Tigre, encuentro en el que se formularon propuestas sobre el respeto al derecho a la educación inclusiva para las personas con discapacidad.
Allí se estableció que le corresponde al Estado nacional la responsabilidad principal e indelegable de fijar y controlar el cumplimiento de la política educativa, tendiente a asegurar a todos los habitantes del país el ejercicio efectivo de su derecho a aprender, mediante la igualdad de oportunidades y posibilidades, sin discriminación de ninguna índole, además de conformar una sociedad justa y autónoma, a la vez integrada a la región y al mundo. Giuggia consideró que "este principio, así como otros expresados en el congreso, se refiere a todos los habitantes de la Nación y abarca a las personas con Necesidades Educativas Especiales (NEE) y a las discapacitadas".
En el caso particular de las personas con discapacidad dentro del grupo de personas con NEE, las experiencias recogidas de la aplicación de leyes, convenciones y tratados internacionales, indican que si no son mencionadas en especial, quedan excluidas de las políticas y acciones para la población en general, siendo olvidadas tanto en el momento de diseñar y aplicar leyes, políticas y acciones, como en la etapa de monitoreo e información sobre el cumplimiento de los distintos instrumentos, ya sea Convención sobre los Derechos del Niño, Convención sobre los Derechos de la Mujer, Pacto sobre Derechos Económicos Sociales y Culturales.
Giuggia explicó que "las necesidades educativas especiales abarca cualquier niño independientemente de la discapacidad, porque existen factores emocionales o ambientales que pueden producir esa necesidad especial. También puede ser producido po la violencia, entorno, la droga, abandono, la falta de alimentación o la falta de condiciones de vida adecuada".
Por eso entiende que este congreso de Educación Inclusiva Regional e Internacional aseguró el goce a la igualdad de oportunidades y posibilidades, sin discriminación de ninguna índole para los niños, jóvenes y adultos con NEE incluidos aquellos con discapacidad.
Casi 20 años
El funcionario de la Defensoría recordó que en 1994 -hace casi 20 años- representantes de 92 gobiernos, incluida Argentina, firmaron la Declaración de Salamanca y su Marco de Acción, renovando especialmente para las personas con NEE el compromiso de la Declaración Universal de Derechos Humanos (1948) y de la Conferencia Mundial sobre Educación para Todos (Tailandia, 1990). En el extenso documento expresan que el principio rector es que las escuelas deben acoger a todos los niños, independientemente de sus condiciones físicas, intelectuales, sociales, emocionales, lingüísticas u otras. Deben recibir a niños discapacitados y niños bien dotados, a niños que viven en la calle y que trabajan, niños de poblaciones remotas o nómadas, niños de minorías lingüísticas, étnicas o culturales y niños de otros grupos o zonas desfavorecidos o marginados.
Asimismo se fija que las personas con necesidades educativas especiales deben tener acceso a las escuelas comunes, que deberán incluirlos con una pedagogía centrada en el niño, capaz de satisfacer esas necesidades. Las escuelas comunes con orientación inclusiva representan el medio más eficaz para combatir las actitudes discriminatorias, crear comunidades de acogida, construir una sociedad inclusiva y lograr la educación para todos; además proporcionan una educación efectiva a la mayoría de los niños y mejoran la eficiencia y, en definitiva, la relación costo-eficacia de todo el sistema educativa
Sociedad más justa
La educación debe ser inclusiva, el Estado debe proveer los apoyos necesarios, que son específicos para este grupo. Los programas de formación docente debe preparar a todos los maestros para desempeñarse en la escuela inclusiva. "Estoy convencido de que la educación inclusiva es la base de una sociedad más justa y que una educación de calidad es aquella que valora el pluralismo, sin dar lugar a ningún tipo de discriminación".
Por último puso de relieve que las personas con discapacidad están comprendidas dentro de aquellas que tienen Necesidades Educativas Especiales, a tal punto que la educación inclusiva nace del modelo social de discapacidad, la cual reconoce que todos los niños y niñas son diferentes y que la escuela y el sistema educativo tienen que cambiar para satisfacer las necesidades individuales de todos los educandos con y sin impedimentos. "Un ingrediente clave es la flexibilidad -reconocer que los niños y niñas aprenden a ritmos diferentes y que los docentes necesitan destrezas para apoyar su aprendizaje de una manera flexible-. Incluye el uso de métodos distintos para responder a las necesidades, capacidades y ritmos de desarrollo diferentes de la niñez. También incluye el lenguaje hablado de señas y braille".