En una reunión convocada de manera urgente en la noche del domingo, el cuerpo de árbitros de la Liga Chaqueña de Fútbol decidió presentar un pedido formal a los dirigentes de la entidad liguista para la suspensión de la actividad deportiva, luego de que sucedieran varios hechos de violencia, y en muestra de total repudio a los mismos.
Luego de varias semanas, y con notas presentadas a la entidad con muestras de disconformidad a la falta de seguridad en los estadios, los colegiados decidieron tomar una decisión drástica para intentar solucionar un flagelo que se da a nivel mundial, pero que golpeó duramente en los últimos días a nuestro fútbol. El fin de semana anterior, en el estadio de Vélez Sarsfield, hubo un enfrentamiento entre barras de este club y jugadores de Municipales, con el saldo de un jugador con heridas de gravedad. Y este fin de semana, un árbitro fue atacado por padres del club Sarmiento, que lo esperaron fuera del estadio luego de un encuentro de inferiores, lo bajaron de la moto a golpes y, una vez que este se encontraba tirado en el piso, lo patearon hasta cansarse y dejarlo malherido. Ahora, los hombres de negro se reunirán con el consejo directivo de la Liga para terminar de definir los pasos a seguir para la suspensión de los partidos en busca de una pronta solución. Aunque todavía no es un hecho, los partidos del fin de semana podrían no disputarse.