Lo confirmó el subsecretario de Protección de Derechos Humanos, Luis Alén, quien detalló que todo sucedió en horas del mediodía. Un grupo comando se adjudicó los llamados intimidatorios.
La Secretaría de Derechos Humanos que funciona en la sede de la ex Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) sufrió una amenaza de bomba.
Lo que primero fue sólo un rumor, se confirmó horas después por la palabra de Alén, quien contó que "en los dos casos las amenazas se concretaron mediante llamadas telefónicas realizadas en nombre de un autodenominado `Comando Patriótico` para exigir la finalización de los juicios a los genocidas".
Funcionarios y empleados de los organismos dependientes del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos aguardaban que especialistas de la Policía Federal completaran su tarea para reingresar a sus oficinas, después de un desalojo preventivo ordenado por sus autoridades.
Tras la denuncia de las amenazas de bomba, los expertos inspeccionaban a primera hora de esta tarde las sedes de la Secretaría de Derechos Humanos, en 25 de Mayo 544, y del Archivo Nacional de la Memoria, en Av. del Libertador.
"No es casual que estas amenazas coincidan con la nueva etapa en los juicios por crímenes de lesa humanidad, como el que comienza mañana del Plan Cóndor, la articulación (represiva) de las dictaduras del Cono Sur" durante los años 70 y 80, analizó Alén.
Finalmente el subsecretario de Derechos Humanos afirmó que "no hay vuelta atrás" con el enjuiciamiento a los represores del terrorismo de Estado. Y subrayó que "se advierte un respaldo masivo a las políticas de Memoria, Verdad y Justicia impulsadas por los presidentes Néstor Kirchner y Cristina Kirchner".