Después del bloqueo de los republicanos, el principal asesor antiterrorista de Obama fue elegido al frente de la agencia de inteligencia
El Senado de Estados Unidos confirmó, este jueves, a John Brennan como nuevo director de la CIA, dos meses después de su nominación por el presidente Barack Obama y tras una obstrucción históricamente larga de un representante republicano sobre el uso de los aviones no tripulados.
La votación resultó en 63 votos positivos contra 34 a favor de Brennan, de 57 años, quien actualmente es el principal asesor antiterrorista de Obama.
El republicano Rand Paul bloqueó durante 13 horas, el miércoles, la votación al reclamar a la Casa Blanca una explicación sobre la utilización de drones (aviones no piloteados) por parte de Estados Unidos en territorio norteamericano.
Sin embargo, a pesar de sus reservas, finalmente Paul fue uno de varios republicanos que permitió que la votación siguiera adelante para la elección de Brennan, el arquitecto de la polémica política de "asesinatos selectivos".
La confirmación de Brennan completa los nombres que conformarán el equipo de seguridad nacional del presidente, tras la confirmación de John Kerry en el Departamento de Estado y de Chuck Hagel en el Pentágono.
"Con los 25 años de experiencia de John en la agencia, nuestros extraordinarios hombres y mujeres de la CIA estarán dirigidos por uno de los suyos", se felicitó el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en un comunicado.
La CIA no tenía director desde la brusca partida de David Petraeus, quien dimitió en noviembre tras descubrirse una relación adúltera con su biógrafa.
Brennan conoce perfectamente la CIA, organismo en el que pasó 25 años. Desde 2009 dirigía la lucha antiterrorista y orquestaba el programa de drones.
Desde ese cargo coordinó una "lista de personas que abatir" pertenecientes a Al Qaeda en Pakistán, Somalia y Yemen.
El proceso de su confirmación permitió colocar en el tapete el debate sobre la utilización de los drones. Los senadores han criticado públicamente al gobierno de Obama por la falta de transparencia del programa.
Paul concretó su amenaza de obstruir la votación en protesta contra una carta divulgada el lunes en la que el secretario de Justicia, Eric Holder, señalaba que "en circunstancias extraordinarias" comparables al 11 de septiembre de 2001, el presidente tendría derecho a ordenar bombardeos con drones en territorio estadounidense contra ciudadanos nacionales sospechosos de integrar grupos terroristas.
Para ello se valió de una regla que permite a los oradores conservar el uso de la palabra tanto tiempo como lo deseen, con lo cual los republicanos se alternaron durante horas para atacar su designación.
Según él, las reglas del programa secreto de asesinatos selectivos en Pakistán, Somalia y Yemen no pueden aplicarse en territorio estadounidense.
El ministro de Justicia, Eric Holder, le respondió este jueves a través de una carta que no dejaba lugar al equívoco.
"He sabido que usted mantiene una nueva pregunta", escribió. "¿El presidente tiene la potestad de utilizar un avión no tripulado armado para matar a un estadounidense que no está involucrado en un combate en suelo americano? La respuesta a esta pregunta es no".
"Tomó su tiempo, pero hemos obtenido una respuesta explícita", se felicitó Rand Paul poco antes de la votación. "Toda la batalla valió la pena".
La organización New America Foundation, en Washington, estimó en 350 la cantidad de ataques realizados por drones desde 2004 en Pakistán, la mayoría durante el mandato de Barack Obama, quien los intensificó. El balance se situaría, según este centro de reflexión, entre 1.963 y 3.293 muertos, de los cuales entre 261 y 305 serían civiles.
Bajo presión, la Casa Blanca aceptó esta semana dar acceso a algunos senadores a los memorandos del Departamento de Justicia, hasta el momento celosamente guardados, que autorizan al presidente a ordenar ataques contra ciudadanos estadounidenses.