El STM continúa su lucha contra el impuesto al trabajo
En un prestigioso diario leí la columna del director, un periodista renombrado como Miguel Ángel Fernández, referida al impuesto a las ganancias.
La verdad, me puso contento de no ser el único que denuncia, porque llegué a pensar que soy como el perro que ladra a la luna, pero al menos hay quien comparte el pensamiento del pueblo trabajador y quisiera hacerles llegar una reflexión de viejo gremialista, ya cascoteado durante más de 30 años:
Nuestra situación ya crítica al igual que las economías regionales, en la que todos los habitantes, productores, comerciantes, empresarios, etc., asfixiados por deudas, y sumado esto a la falta de rentabilidad de sus productos, hacen un panorama sombrío, en el cual también le son descontados altos impuestos de todo tipo, tampoco podemos dejar pasar la contradicción de que los mismos trabajadores piden no estar en blanqueados para no perder los subsidios sociales, asignaciones universales, etc. y son perseguidos por el Ministerio de Trabajo, todo por falta de una POLÍTICA coherente en serio,
Para la mayoría del pueblo asalariado el panorama no es mejor, ya que sumados a esos impuestos de todos los colores, por ser consumidores, te agregan el “impuesto al trabajo”, o sea te descuentan del sueldo los impuestos a las ganancias como si estos fueran recaudados de un plazo fijo, o rentas; realmente una vergüenza y sepan algunos datos nomas: un trabajador en la Argentina paga casi la mitad de impuestos, cosa que en otros países latinoamericanos se necesita tener entre 4 y 8 veces más sueldo.
Por estas y algunas otras reflexiones, hechas denuncias públicas, he tenido que pagar altos costos no solo políticos, sino también otros a nivel institucional, como la sanción de dejar sin efecto el convenio suscripto entre la Federación de Trabajadores Municipales del Chaco y la U.N.N.E., por parte del gobierno nacional, para no permitir la capacitación de nuestros afiliados.
Este es el modelo político imperante, donde no se puede hablar o pensar distinto, plantear una realidad, sin que te lluevan palos; por eso siempre fui combativo y ahora en el último rezongo de la bombilla, seguiré defendiendo al pueblo trabajador, como dijo el General, los trabajadores son el primer hueso de la columna vertebral, no el último; para que lo sepa este gobierno que piensa al revés.