Bosquín Ortega y sus épicas íntimas en la Feria del Libro
El escritor y cantautor Bosquín Ortega se presentará el sábado 20, a las 21, en el auditorio de la Casa de las Culturas, en el transcurso de la Feria del Libro. En la ocasión, subirá a escena con Épicas Íntimas, un memorial poético-musical de su autoría y composición. Se trata de un montaje del género de Juglaría, con la interpretación personal de Bosquín, sin el acompañamiento de una banda de soporte.
Un encuentro abierto y directo, en intimidad rememorativa, que recuerda en poema y canto a las secretas, fecundas y fraternas epopeyas personales de hombres y mujeres de la Chaqueñidad, seres del Chacú, criaturas chaquenses, que libraron combates callados de una épica anónima para vertebrar el destino y el sentido de la identidad natal. El homenaje epónimo incluye a Zunilda Méndez (fundadora del Coro Qom Chelaa-Lapí “Bandada de Zorzales” y Piagonak, sanadora); al Noviké (Violín de Lata); a las Etnias nativas y su vínculo con el pueblo negro; a Segundo David Peralta (Mate Cosido); a Ignacio Rolón, poeta y militante popular; a Doña Rubita Franco, abuela-símbolo de Margarita Belén; a los Mártires de Margarita Belén; al hombre desconocido que lucha contra las inundaciones; a Emerenciano Sena, piquetero y dirigente comunitario; a Francisco Juan y Alberto Antonio Ortega, ancestros ferroviarios; a Ramón Andrés Segovia (Zitto) cantautor y compositor; a Néstor Antonio Fuentes (“Bagual”), bailarín, coreógrafo y Arandú (sabio); a Juan Cardozo, combatiente en Malvinas y a La Tusca, árbol silvestre y resistente, símbolo del pueblo chaqueño. Las gestas puntuales de los hombres son una analogía existencial de los fastos plurales de las epopeyas colectivas. Tales seres, son los destinatarios de éste memorario musical.
ABUELA QOM Chamamé
Su canto de tierra que vuela bendice la vida que vibra, presencia de América entera, origen que guarda vigilia.
Regresa al mandato del fuego y nace el rastro de su raza al verbo heroico del ancestro en su nostalgia de resolana.
Aura de monte, libro de viento, lucero de ardientes zorzales: sus ojos, aljibes de cielo, consuelan la sombra en la tarde.
Zunilda Méndez, abuela Toba, cura males, tocando el alma, como el Maestro su mano posa, sana heridas con su palabra.
Su estirpe de mito proclama el salmo agreste sin olvido, antes del barco el trino estaba latiendo en designio nativo.
Misterio antiguo en su garganta, un linaje de tierra pura, milenios de danza encarnada al sonido que busca la luna.