Capitanich: La escultura 617 representa nuestras simientes hacia el futuro
El intendente Jorge Capitanich participó este miércoles de la inauguración de la escultura 617 de la ciudad, denominada Simientes Étnicas, donada al municipio de Resistencia por la Legislatura como parte de la celebración por el Bicentenario de la Independencia.
La obra, cuya autora es la reconocida artista Mimo Eidman, está emplazada en el cantero central del acceso por Sarmiento y autovía Nicolás Avellaneda, y desde hoy forma parte del patrimonio cultural de la capital provincial.
“La escultura representa una síntesis de nuestra historia, nuestro compromiso con el presente y nuestras simientes hacia el futuro; enriquece la celebración del Bicentenario y es un homenaje a la Patria”, aseguró Capitanich.
El acto de inauguración de la obra de arte contó con la participación del vicegobernador Daniel Capitanich; la presidenta de la Legislatura, Élida Cuesta; concejales, diputados y funcionarios municipales y provinciales; además de la autora de la escultura y representantes de la cultura local. “Quiero agradecer, en nombre del pueblo de Resistencia, a la Cámara de Diputados por esta contribución a la ciudad; de esta manera se agiganta nuestro patrimonio cultural”, sostuvo el intendente.
Capitanich también valoró el hecho de sumar la escultura 617 y señaló que estas obras de arte representan un ícono y un emblema para los resistencianos.
El jefe comunal remarcó especialmente la escultura habilitada este miércoles y afirmó que la creación de Mimo Eidman “se enraíza profundamente en nuestras costumbres, nuestra identidad cultural, multireligiosidad, nuestros pueblos originarios, criollos e inmigrantes”.
“Mimo es una artista de nota y refleja una percepción muy particular desde sus sentimientos; cuenta con una sensibilidad muy especial, que se conjuga con una técnica artística de excelencia”, resaltó el intendente.
La obra Simientes Étnicas es una escultura de acero inoxidable montada sobre una base de hormigón visto, iluminada con luces de LED. Su donación al municipio capitalino fue una iniciativa del diputado provincial Hugo Domínguez, acompañada por unanimidad en la Legislatura.