Cataratas ovacionó la última gala de “Iguazú en Concierto"
A sala colmada la IV edición del “Iguazú en Concierto” se despidió, anoche, de las galas en hoteles con la presentación de solistas y bandas que deleitaron al público presente. El broche de oro lo tuvo la madrina del evento, Elena Roger, cuando interpretó “Soñé un sueño” y “Mi bella dama” acompañada por la orquesta del Festival.
El ingreso a la sala del hotel Iguazú Grand, sitio de la gala, ofrecía el primer impacto: el choque cultural ante los diferentes idiomas de los jóvenes músicos, sus vestimentas y la interacción que ellos desplegaban a pesar de la lejanía geográfica de sus países. Hecho fácil de vislumbrar en la gente que, luego de subir las escalinatas de ingreso a la sala, lo expresaba entre sonrisas con sus acompañantes; sobre todo cuando observaban las faldas de la orquesta de gaitas de la “St. Thomas’ Episcopal Pipe Band”.
Luces de colores enmarcaban el escenario preparado para la ocasión captando la atención de los presentes cuando, Andrea Merenzon, directora artística, los saludó y comenzó a detallar las características del show.
Eva Mylle tuvo la responsabilidad de abrir. Proveniente de Francia, con sólo 13 años, fue la ganadora de la instancia del“Iguazú Audition” que le permitió ser una de las elegidas para viajar a Iguazú. Interpretó obras como “Erik Satie –Gnossienne No. 1”, “Claude Debussy – La Fille aux cheveux de lin”, entre otras. Fue ovacionada cada vez que abandonó el banquillo de su piano para reverenciar al público que la acompañó con atención.
Merenzon dio paso luego a María Andreeva, la talentosa violinista rusa de 13 años. La jóven desplegó toda su destreza en la interpretación de “Niccolo Paganini – concierto No.2” y “Pablo Sarasate – Intro. & Tarantella, Op. 43”acompañada por Mylle en el piano.
Para la siguiente presentación el recuerdo fogueó la emoción de los aplausos cuando la directora artística presentó a los hermanos Han: “Dos niños prodigio imbatibles”. Joshua, pianista, con sólo diez años fue el otro de los ganadores del “Audition” con unanimidad de opiniones del jurado. Su hermano Oscar (12) lo había ganado el año pasado. Cambiaron el repertorio del programa y lo ajustaron al que ellos sintieron que era adecuado para ese momento. La gente se paró para aplaudirlos en sus efusivas reverencias en las que dejaron notar la mezcla de inocencia e invalorable talento.
El siguiente número fue el del cuarteto de cuerdas de la “Cukurova University Adana String Quartet” de Turquía compuesta por Deniz Sensoy, doga Altinok, Umay Akanal en violín y Ulker Tumer en violoncelo. Interpretaron piezas como “Ismail Dede Efendi – Yine bir Gulnihal, Katip”, “B. Kirvert – Polka”, “Wolgang Amadeus Mozart – Pequeña”, entre otras. También concitaron el encuentro del público en los aplausos.
Tras un pequeño receso apareció la orquesta“Iguazú en Concierto” que musicalizó la intervención de Elena Roger:“Apláudanlos a ellos”, decía la madrina del festival que insistía en que “ellos son los verdaderos protagonistas”. Su interpretación de los temas y su interacción con los chicos, arriba del escenario, quedó también registrado en las decenas de celulares alzados que intentaban registrar el momento, para luego revivirlo o compartirlo con quienes no pudieron estar.
Para finalizar, cuando el escenario había quedado vacío, comenzó a sonar “Cosmos cascade”, interpretado por los jóvenes de St. Tomas que ingresaron en fila desde afuera de la sala, se desplazaron por el pasillo y se acomodaron frente al público. Interpretaron, también, “Once Upon a Dream”,“The Medley”, “Secure Ambition”, entre otras. Se destacaba el sonido de las gaitas, elemento característico de la banda.
Cuando culminó el espectáculo, los espectadores aprovecharon el espacio para tomarse fotografías con los jóvenes músicos que vivieron el festival, intercambiar sensaciones con ellos y comentar con sus acompañantes los detalles de la velada. “Fue fantástico”, expresó una mujer que intentó una definición mientras, con sus brazos, trataba de abarbar el espacio imaginario del escenario.