Señor Director: Veo con desagrado la permanente intención de una oficina dependiente de la Cámara de Diputados, denominada Oficina Interdisciplinaria para la Prevención y Sanción de Violencia Laboral, de inmiscuirse dentro de la estructura orgánica de la Municipalidad de Resistencia, con el claro objetivo de controlar la vida de los agentes municipales en el cumplimiento de sus deberes, cuestión esta que hemos elevado al intendente Capitanich, solicitándole deje sin efecto la Resolución Nº 826/17 mediante la cual se adhirió a la Ley Nº 7006 (hoy Ley 2023-A), permitiendo que esta atrevida y ajena entidad diga qué tenemos que hacer ante una determinada situación.
La Municipalidad de Resistencia cuenta hace más de 40 años con la Dirección de Sumarios, dependencia propia y con competencia para sancionar conductas estatutarias porque los municipales tenemos derechos y también obligaciones, pero esta comunidad de trabajadores no tiene por qué someterse a la opinión de trasnochados que carecen de conocimientos sobre cómo funciona el reglamento interno, y sugieren sanciones de traslados o separaciones de cargos, como suspensión de pago de haberes como si esto fuera un juego sin consecuencias.
Desde comienzos de año le planteamos a Jorge Capitanich que deje sin efecto esta putocrática resolución firmada por él, porque entendemos que él como máximo responsable municipal y hombre de derecho no puede permitir el atropello e injerencia sobre los trabajadores municipales. Esta oficina que depende de la Cámara de Diputados, creada por Ley Nº 7006, presidencia de Élida Cuesta, ahora pretende controlar el procedimiento de la Dirección de Sumarios, cuando esta dependencia se rige por el estatuto del empleado municipal (Ordenanza 1719/90) y Decreto Provincial Nº 1311/99, desde siempre. Entonces cuál es la verdadera intención de esto, por qué ese ensañamiento de estos foráneos, salvo que subestimen la capacidad de un trabajador municipal y sus áreas de servicios y técnicas.
A estos foráneos le informamos que deben conducirse con el respeto que implica estar ante un Estado con autonomía y respeto a la ley; y por sobre todo respeto a la persona de los trabajadores municipales que ante cualquier conflicto está la Dirección de Sumario para dirimir y resolver sin que esta “oficina” de la Cámara de Diputados le diga qué hacer. En mi condición de secretario General de los trabajadores desde hace más de 35 años, no lo permitiré. Los saludo atte.