Instalan centro de evacuación ante riesgo de inundación en el Chaco
De momento no existen comunidades afectadas por la crecida del río Pilcomayo. El riesgo de desborde persiste, por lo que Emergencia Nacional desplegó un plan de evacuación en la zona de Pozo Hondo.
Casi 100 familias indígencas serían evacuadas ante el riesgo de inundación en la zona de Pozo Hondo, Chaco Paraguayo.Foto archivo UH
Rafael Valdez, ministro de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), anunció que desde ayer tienen instalado una base de operaciones para atender a las personas que eventualmente sean alcanzadas por el agua.
“Hasta el momento no existen comunidades afectadas”, aseguró en contacto con Cardinal AM. De cualquier manera realizarán un sobrevuelo sobre algunas poblaciones más aisladas para verificar in situ la existencia o no de afectados.
El centro de evacuación se instaló ayer en Joel Eulogio Estigarribia, un fuerte militar situado a 80 kilómetros de Pozo Hondo –la zona en riesgo-, en caso de que se precise de evacuación.
El Ing. Lucio Amarilla, director de la Comisión Pilcomayo, indicó que el crecimiento del río si bien es preocupante todavía no alcanza un nivel que podría inundar.
“El riesgo que está preocupando es agua viene con muchos sedimentos, y si eso continúa en ése nivel puede colmatar algunos canales naturales del lado paraguayo que pasan agua a los distintos bañados y esteros; si eso sucede puede haber un aumento brusco que aísle a algunas poblaciones”, afirmó Valdez.
Al menos cuatro poblaciones indígenas, entre 90 a 95 familias, son las que estarían en mayor riesgo. Los alimentos alcanzan para 100 familias para al menos 15 días de sobrevivencia.
“Estamos llevando kit de alimentos, chapas e inclusive combustible para el helicóptero en caso de que sea necesario una evacuación rápida”, señaló el titular de la SEN.
En el transcurso de mañana realizarán trabajos de monitoreo del Pilcomayo. Valdez refirió que este comportamiento del río es recurrente cada año desde el mes de diciembre.
Causas de la crecida
La diferencia es que este año se produjo una caída inusual de lluvia, en el lado boliviano, por lo que el lecho fluvial arrastra más sedimentos de lo común.
A esto se suma que en el lado argentino, el principal canal de desagüe está casi bloqueado debido a que no se realizaron aparentemente en forma los trabajos de mantenimiento.