El sábado 1° de junio de 2019, por la tarde asenté el ultimo ladrillo común en una pared de la Casa de la Madre y el Niño , conocida como Casa Garrahan Chaco, con unos cuantos añitos , kilitos y canas de más , pero con la misma alegría que aquel sábado 17 de abril de 2010 cuando puse el primer ladrillo sobre la viga de fundación.
Cuanto tiempo , cuantas promesas, cuantas amarguras, cuantas mentiras, cuantas espaldas que conocí en estos 9 años de trabajo incansable para levantar la mayor obra que construyó la solidaridad en la historia del Chaco.
No fue magia, sin dudas fue mucho trabajo duro y parejo , participación ciudadana, donaciones, tapitas, papeles , cartones, botellas, eventos, tecitos, maratones, Fernandos y mucho pero mucho Amor por el otro.
Gracias a todos lo que creyeron en mi sueño, a los que desconfiaron y se sacaron las dudas, a los frustrados de siempre que apostaron todas las fichas al casillero del fracaso y perdieron, a los inútiles crónicos que aseguraban la inconclusion de la obra , a los ingenuos que ayudaron sin hacer muchas preguntas, a los niños que ayudaron sin saberlo a otros niños que están enfermos, gracias a algunos funcionarios, a los periodistas , a casi todos los medios de comunicación, a muchas empresas,a los abuelos que no quieren irse de la vida sin dejar alguna huella, a ricos y pobres, a todos los que saben que esta obra servirá a muchas generaciones de niños que la necesitan para mejorar sus vidas. Sin dudas gracias a Dios que nos acompañó todo el tiempo y nos guiara por los caminos que siguen.
Pero lo más lindo de todo es que pude demostrar al mundo que cuando la gente se junta detrás de un proyecto útil para la sociedad , la diferencias se desdibujan y terminamos todos felices. " Que la Gente sepa... que la gente pudo ".
Arq. Carlos Alabe Presidente Fundación Ciudad Limpia