Domingo, 22 de Diciembre de 2024
Instagram Facebook Twitter Youtube
Mariano Moro
Viernes, 4 de octubre de 2019
Cómo se atreven
Como todos sabemos la preocupación por el ambiente es uno de los principales temas de atención para las sociedades del mundo entero. Tratar de entender qué es lo que está pasando en el mundo con la huella ecológica, esto es con la impronta que la raza humana está dejando en el planeta tierra, es el primer paso para avanzar en busca de mejores actitudes.


La lucha por defender el medio donde vivimos quienes habitamos el planeta tierra comienza a fines de los sesenta con los primeros grupos ecologistas, quienes se caracterizaron por su acción directa y de choque.

Luego con una mirada más amplia surgieron los grupos ambientalistas. Las acciones fueron desde acción directa como la recordada de los grupos como Greenpeace, o las campañas de toma de conciencia para cambiar los hábitos de consumo; la fabricación de productos “verdes” o no contaminantes; la realización de cumbres mundiales con el fin de tomar medidas gubernamentales, por canales formales como las organizadas por la ONU desde la cumbre de la Tierra en Suecia en 1972 y las posteriores, o las paralelas de los grupos informales u ONGs.

No solo que NADA DIO RESULTADO, sino que las medidas para proteger el ambiente terminaron siendo funcionales la degradación ambiental y solo sirven de placebo para calmar la conciencia.

En este contexto, surgen varias individualidades que lideran sectores de lucha ambiental. activistas como Isha Clarke; Isra Hirsi; Xiye bastida; Artemísia Xakriabá; Nalleli Cobo, y la recientemente famosa Greta Thumberg entre otros.

Greta Thunberg convirtió la huelga de una sola persona en un movimiento global masivo convirtiéndose así en la cara de la lucha de su generación contra el cambio climático. Recientemente, la joven de 16 años pronunció un discurso apasionado en la Cumbre de Acción Climática de la ONU sobre el estado de descomposición de nuestro planeta Tierra. De forma emotiva, advirtió a los líderes que estamos en las primeras etapas de una extinción masiva.

Algunas frases del discurso de la activista resuenan aun hoy, como por ejemplo “han robado mis sueños y mi niñez con sus palabras vacías” y la repetidas veces manifestada “como se atreven”, entre otras.

Más allá de las distintas posturas a favor y en contra de esta activista, de los intereses que puedan haber detrás de su participación, es interesante analizar el concepto que sustenta su discurso, la visión que nos propone a todos. Desde algún punto esta oposición entre ustedes y nosotros genera por lo menos un punto de partida poco feliz. Efectivamente, amén de establecer una brecha entre dos sectores donde uno sería la víctima sin responsabilidad ni participación alguna, con una visión esquizofrénica de la sociedad, hay muchas cosas que están mal en el planeta tierra pero la cuestión es bastante más compleja que las expectativas de futuro individual o siquiera de un grupo etario.

La cuestión ambiental excede la cuestión ecológica, excede incluso el tema del calentamiento global, de hecho el aspecto social del ambiente ha tomado un rol protagónico en las prioridades ambientales, a tal punto que dentro de la agenda 2030 de la ONU está en número 1 el “fin de la pobreza” y en el 2 el del “hambre cero”, por los grandes sectores poblacionales en estado de indigencia que no tienen ni alimentos, ni condiciones sanitaria mínimas. Le siguen Salud, Educación, igualdad de género para finalmente llegar al tema de las energías sustentables.

En esta inteligencia cómo escindir la necesidad de crecimiento económico para poder mejorar esta situación social acuciante. De ninguna manera podría siquiera intentarse dar respuesta al hambre, a la salud, a la educación, sin plantearse la necesidad de crecimiento económico. Entonces surge evidentemente ingenuo un planteo demanando menor contaminación sin entender la complejidad del contexto.

Por otro lado resulta también opinable la visión de una sociedad fraccionada donde hay sectores que reclaman derechos sin asumir ninguna responsabilidad ni compromiso. Esta idea de “robar futuro” es claramente facciosa y poco constructiva, por cuanto plantea justamente esta dualidad con poco sustento. La historia de la humanidad, constituye un largo itinerario de mucho sacrificio y dolor a través de los años para ir construyendo sistemas de derechos que morigeren el abuso de poder. Hoy no tendría siquiera la posibilidad de manifestarse como lo hace Greta si no hubieran habido todas las guerras y conflagraciones políticas y avances científicos habidos.

Sin duda las guerras, y conflictos que marcaron la historia fueron procesos traumáticos, pero permitieron también avances en los sistemas políticos que con todos sus distorsiones son mejores que los de los tiempos pasados; y la ciencia con todas sus distorsiones han generado esquemas de beneficios que nunca existieron. Digamos que sería impensable para ningún sector joven tener las condiciones de vida que existen actualmente.

No es que los jóvenes nacieron por generación espontánea y tiene derecho a exigir utopicamente un futuro impoluto. Esto no es así porque hay un contexto que viene con la historia del hombre donde están y de esto hay que hacerse cargo toda la humanidad, incluso los jóvenes. Así como los jóvenes como los adultos tienen derecho a un futuro, también tienen la obligación de enfrentar los problemas actuales porque de lo contrario tampoco habrá un futuro.

Es cierto que todos tenemos derecho a un futuro; que todos tenemos derecho a un ambiente sano y adecuado para la vida humana, pero esto no puede desentenderse de las necesidades que toda la raza humana tiene, y que la actividad para satisfacerla constituye paradojalmente un factor de desequilibrio ambiental.

Los países europeos exigen por ejemplo a Brasil que deje de contaminar cuando ellos mismos son mucho más contaminantes, y cuando no se tiene en cuenta el problema social que lo lleva a tomar estas medidas es claramente una hipocresía inadmisible.

En síntesis, es cierto que hay muchas cosas que están mal, es cierto que los lideres del mundo no tienen el compromiso que demanda la situación, pero la respuesta no es ponerse en lugar de víctima y demonizar a los demás. Ni siquiera hay una sola respuesta, por cuanto el trabajo es mucho más duro porque requiere compromiso y participación de todos los sectores y consensos básicos que no se logran acusando.


MARIANO MORO
Director grupo ambientalista
UNA TIERRA






Editor Responsable: Jorge Tello
redaccion@eschaco.com | direccion@eschaco.com
Reportero: 3624647631 - Redacción: 3624895748
Copyright ©2013 | www.EsChaco.com
Todos los derechos reservados.
Desarrollado por Chamigonet - Diseño Tapa: DG ___anny