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Domingo, 30 de marzo de 2025

¿Comenzaron los despidos en Incluir Salud?: Echaron a una trabajadora con 13 años de antigüedad y crece el temor entre los contratados

Erika Wesqui fue desvinculada de la obra social que tiene más de 90 mil afiliados en el Chaco y es manejada desde hace algunos meses por el hijo de la ministra Naidenoff. “Me siento triste, me comunicaron por teléfono que no me renovarán”, aseguró la mujer.

Erika Andrea Wesqui, empleada en el Chaco de Incluir Salud, el programa federal financiado por Nación y Provincia, fue notificada por teléfono de que no le renovarían el contrato.

Su desvinculación se da en un contexto de precarización laboral, malestar entre afiliados y controversias que salpican al actual director del organismo, Iván Kaluk, hijo de la ministra de Educación, Sofía Naidenoff, quien fue designado meses atrás por el gobernador Leandro Zdero

La crisis de Incluir Salud en el Chaco suma un nuevo capítulo. Wesqui, trabajadora de la obra social destinada a personas con discapacidad, denunció públicamente su despido tras 13 años de servicio.

La noticia, que le fue comunicada por teléfono en una maniobra que puede ser interpretada como una falta de respeto, no solo evidencia la precarización laboral que atraviesan los empleados del programa, sino que también ocurre en un momento crítico: afiliados y proveedores denuncian un progresivo deterioro en las prestaciones, demoras en la entrega de insumos esenciales y una gestión cuestionada por su ineficiencia y otras controversias.

"Ayer recibí la peor noticia que jamás pensé en recibir, después de 13 años trabajando en Incluir Salud me comunicaron por teléfono que no me renovarán más el contrato", escribió Wesqui en sus redes sociales, expresando su desazón y agradecimiento por los años de trabajo. La trabajadora también reveló su fuerte vínculo con los afiliados y médicos, a quienes ayudaba en medio de un sistema burocrático cada vez más caótico.

Un sistema en crisis

Incluir Salud, un programa que asiste a unas 90 mil personas solo en el Chaco, ha sido objeto de múltiples denuncias en los últimos meses. Pacientes y familiares relatan demoras en la provisión de prótesis, medicamentos y tratamientos indispensables.

La situación se ha agravado con la llegada de Iván Kaluk a la conducción del programa. Kaluk, hijo de la ministra Naidenoff, no solo es cuestionado por no ser de la provincia –es formoseño y fue funcionario y candidato en esa jurisdicción–, sino que además enfrenta denuncias por presunta malversación de fondos cuando fue titular del PAMI de Formosa durante el gobierno de Mauricio Macri.

Su gestión ha sido señalada por problemas serios en la administración de recursos y por la falta de respuestas a los reclamos de los afiliados. Mientras los pacientes ven cómo sus derechos se vulneran día a día, el personal de la obra social trabaja bajo contratos precarios y con el temor de no ser renovados en cualquier momento, como ocurrió con Wesqui.

Precarización laboral y falta de respuestas

El despido de Wesqui abre un panorama incierto para el resto de los trabajadores de Incluir Salud en la provincia. Muchos de ellos mantienen contratos temporales sin estabilidad y con el riesgo latente de perder su empleo sin previo aviso. La falta de transparencia en las decisiones administrativas y la creciente cantidad de denuncias han generado un clima de preocupación entre el personal.

El futuro del programa es cada vez más incierto. Con la prestación en declive, los trabajadores en alerta y una gestión cuestionada, la pregunta es inevitable: ¿quién responderá por la salud de los miles de chaqueños que dependen de este sistema?.

Por el momento, ni el gobierno provincial ni el nacional han dado explicaciones sobre la situación. Mientras tanto, los afiliados y los trabajadores de Incluir Salud siguen esperando respuestas en medio de un sistema que parece colapsar.