Jueves, 23 de Enero de 2025
Instagram Facebook Twitter Youtube
CORRIENTES: EL CASO ORIANA
Lunes, 7 de octubre de 2013
Chica raptada y violada defiende a presunto asesino
La adolescente víctima de una fuerte historia policial hizo una repentina aparición. Dice que el joven detenido por el crimen de otro hombre “no es culpable”, contradiciendo su versión inicial. Le agradece por haberla defendido de “un secuestrador‘. ¿Es manipulada?

“Vengo a hablar de un caso de secuestro. ¿Se acuerdan de lo que pasó hace unos años en Empedrado, de Oriana? Bueno, esa soy yo”. Así, a secas, aquella adolescente que tenía 14 años en febrero de 2011, hoy de 17, víctima de un rapto, supuesto abuso sexual y testigo del asesinato y descuartizamiento del hombre sindicado como su secuestrador, se presentó ante un periodista de diario época para hablar de “la verdad”, su verdad, acerca de uno de los episodios criminales más fuertes que se haya registrado en la historia policial de la provincia de Corrientes.

La repentina aparición ante un medio de prensa de esta jovencita tenía un motivo, un fin, en particular. Realizar una defensa abierta, pública, de Jacobo Eleoned Guerra, el joven de 25 años detenido e imputado del crimen de Jorge Oscar Rodoni, aquel hombre señalado como responsable de llevarse a la fuerza a la menor.

Guerra actualmente se encuentra encerrado en la Unidad Penal 6 de San Cayetano a la espera del juicio (a iniciarse posiblemente en no mucho tiempo más) en el que afrontará serios cargos que podrían condenarlo a prisión perpetua. Entonces, ¿es casual que la adolescente saliera de este modo a intentar desligar al detenido?

“Le hicieron confesar (a Guerra) una mentira, a que diga que él mató a ese señor (así se refiere a Rodoni, de 56 años), pero él no fue. Estoy agradecida porque él (Guerra) me cuidó, me defendió; por haberme protegido cuando no me conocía”, explicó la adolescente
Si bien evitó decirlo, existe una clara relación afectiva entre Jacobo y la menor. Muestra de ello es una conocida red social donde en sus respectivas cuentas demuestran mutuo interés. “Sí, dos veces fui a visitarlo a la cárcel; un rato nomás porque no lo dejaban hablar y yo tengo prohibido ir a verlo”, dijo ella.

¿Alguien te mandó a decir todo esto? “No, nadie. Vine sola porque quiero que de una vez se diga la verdad. No quieren (menciona a la Justicia, su familia, otras personas) que hable con los medios, que diga la verdad; él (otra vez aludiendo a Guerra) no es un asesino”, dijo ella.

Durante una charla de casi media hora, Oriana relató en detalle la forma en la cual supuestamente fue raptada a manos de Rodoni. Cómo transcurrieron los 27 días desde su desaparición ocurrida el 20 de enero hasta su hallazgo en una casa de la localidad de Empedrado, donde la Policía dio con el cadáver enterrado y mutilado.

“Me llevó desde el barrio Quintana hasta Resistencia. Yo trabajaba en una verdulería y él vivía al lado. Me amenazó, me golpeó. Allá en un hotel estuvimos casi dos días. Hizo que estuviera con él (habla de abusos sexuales) De ahí me trajo en colectivo a Corrientes y al rato me llevó a Empedrado. Allá me tenía todo el tiempo con él”, recordó.

El actual relato mantiene muchas menos coincidencias con lo que la adolescente dijo ante un grupo de profesionales en Cámara Gesell. Existen variaciones en varios puntos. El principal indica que si en su momento mencionó a Guerra como el autor del crimen fue porque “hicieron que yo mintiera y dijera que fue él”. Ayer, una fuente policial que trabajó en el caso explicó que “ya sabíamos que la menor estaría enamorada de ese sujeto; él podría tener el poder de manipularla”.

El miércoles 16 de febrero de 2011 la Policía localizó a Oriana y a tres jóvenes, a dos hermanos y a Jacobo, en una vivienda de calle La Rioja y Chile del barrio Unión de Empedrado.

Al día siguiente, dieron con los restos de Rodoni en esa propiedad. Bajo tierra en tres pozos distintos, al final de un barranco cercano al río Paraná, estaban los brazos y la cabeza; el tronco y los muslos, y las tibias y los pies (a su vez cortados a la mitad).

A pesar del estado de putrefacción debido a las altas temperaturas, los investigadores lograron identificar al hombre por dos tatuajes.

“Vi todo”

Sin precisar el día, la menor dijo que uno de aquellos hermanos dueño de la casa (al principio demorados y luego liberados), peleó con Rodoni “por plata” y después lo descuartizó. “Hizo todo eso adelante mío”.

Esta versión, tanto para la Policía como para la Justicia no tendría correspondencia con la realidad, siempre en base a las pruebas recolectadas en la causa.

En cuanto a la relación con Jacobo mencionó que “a los 10 días o dos semanas llegó a esa casa y me ayudó a que (Rodoni) no me golpeara. No estaba con ellos. Estuvo un día, se fue y volvió después de que ese otro matara al señor y fue cuando estuvimos juntos unos días más hasta llegar la Policía”, explicó.

En aquel entonces los detectives, consultados por época, dejaron trascender que Guerra se quebró y contó en lujo de detalles lo que había cometido cuatro o cinco días antes de que todo saliera a la luz, cuando habría cometido el crimen y luego ocultado las partes seccionadas del cadáver.

Según lo señalado en etapa de instrucción, Guerra primero habría degollado a Rodoni y acto seguido lo habría despedazado, porque aquel habría intentado abusar nuevamente de la jovencita de la que él comenzó a interesarse. Hasta hubo versiones de que el sospechoso, amante del “culto” o estilo Dark, había bebido la sangre de su víctima.

“Quería venderme”

Antes de ser localizada gracias al llamado de una comerciante que la reconoció (la jovencita, presuntamente ya con Rodoni muerto, fue a comprar a un almacén mientras su fotografía era publicada en todos los medios), Oriana recuerda que el mecánico que la raptó tenía planeado enviarla al sur. “Varias veces decía que quería venderme a gente de otra parte”.

La menor mencionó haber atravesado difíciles situaciones familiares. Sostiene que hasta el día de hoy “muy pocos” le prestan atención. Que la discriminan, la hacen de lado. Conocido el caso ha sido culpabilizada, como si todo hubiera sido su responsabilidad con apenas 14 años. En la escuela a la que volvió a concurrir “decían que yo era una p...”.

Vale recordar que la juez Irma Domínguez, cuando el caso era noticia de amplia repercusión, dijo que “hay cosas contundentes y terroríficas de lo que vivió. Eso según sus dichos. Ahora deberemos analizar si lo que cuenta es cierto”, añadió.

“Contó todo. Pero es su versión. Dio detalles de todo tipo, es algo horroroso”, se limitó a decir.

La jovencita, entre lágrimas, mencionó que a raíz de todo lo que pasó tiene pocos amigos. Antes de concluir la charla vuelve a repetir que “hay un inocente preso”.

Así, esta adolescente personaje central en semejante caso policial, volvió a defender al presunto asesino al que ella, sin decirlo pero demostrándolo, ahora parece adorar.

(Epoca)


Editor Responsable: Jorge Tello
redaccion@eschaco.com | direccion@eschaco.com
Reportero: 3624647631 - Redacción: 3624895748
Copyright ©2013 | www.EsChaco.com
Todos los derechos reservados.
Desarrollado por Chamigonet - Diseño Tapa: DG ___anny