Jerome Valcke, secretario general de la FIFA, dio inicio a una nueva visita para ejercer "presión" a la organización de la Copa del Mundo del año próximo
"En la recta final es necesario poner cierta presión, mostrar que estamos siguiendo el proyecto y no estamos sentados en Zúrich", explicó Jerome Valcke, encargado desde un primer momento de controlar la organización brasileña para el Mundial 2014.
"Es necesario ver todos los detalles. Este período no puede ser usado para descansar, sino para terminar todos los detalles que faltan para garantizar que el evento sea un éxito", indicó en rueda de prensa.
Valcke, que el año pasado pidió una "patada en el culo" para acelerar la organización, minimizó, sin embargo, los atrasos en algunas de las obras y reiteró su confianza.
"Claro que aún hay cosas por hacer, pero hemos trabajado muy bien con el gobierno brasileño. (...) No voy a estar llamando al alcalde o gobernador para ver cómo están las obras", lanzó.
Este lunes, el secretario general de la FIFA visitó el estadio Beira Rio de Porto Alegre, que albergará cinco partidos del Mundial y cuya remodelación está concluida en un 90 por ciento.