Complicaciones en Canasvieiras para un grupo de chaqueños y correntinos
Más de una docena de pasajeros que contrataron sus vacaciones en Canasvieiras con la empresa correntina Vía Médano, a través de la chaqueña Pilar García, están padeciendo la falta de cumplimiento de lo acordado en ese paradisíaco lugar de playas cercana a la ciudad de Florianópolis, capital del estado de Santa Catarina, en Brasil.
Después de haber penado en los días previos para conseguir “reales”, llegar al lugar de destino en las vacaciones habría resultado una bendición, sin embargo la pesadilla recién estaba por comenzar.
A más de mil kilómetros del lugar de partida, quienes arribaron al hotel contratado, el Paraíso Palace I, en Canasvieiras, quienes compraron sus vouchers con Vía Médano, de Corrientes, descubrieron que su lugar de estancia estaba lejos de los folletos publicitarios que mostraban a la hora captar clientes haciendo ofertas.
El contingente de chaqueños y correntinos llegó al Paraiso Palace I, que sí tiene los servicios que habían contratado aquí, pero no es lo que estaba reservado para ellos. Habitaciones twin o suites matrimoniales, con balcones con vista a la playa, aire acondicionado, teléfono y wifi se trastocaron repentinamente en humildes cabañas, sin teléfono ni Internet inalámbrico, con camas de cemento, un catre para el que no cupiera y nada de vista al mar.
Algunos de los pasajeros se negaron a aceptar y exigieron en el lobby del hotel que se cumplieran las condiciones contratadas y en el hotel señalaron con claridad que esos servicios no eran los que habían reservado las empresas contratantes.
Costosas llamadas desde Canasvieiras a Resistencia, con una de las empresas que vendían paquetes para la empresa correntina, sirvieron solamente para confirmar que había que conformarse con lo que se le estaba dando, a valores muy por debajo de lo que se habían embolsado estos “empresarios” correntinos.
“Ya está solucionado”, le dijeron desde Pilar García a dos amigas que reclamaron. Habían contratado una habitación doble twin y se encontraron en el Paraiso Palace I de Canasvieras con una cabaña en los fondos del complejo con una cama matrimonial de cemento, sí de cemento, sin colchón. La solución fue sí agregarle luego una colchoneta tan fina que no dejó dudas de que finalmente había concreto debajo. Y a la acompañante, un catre, como los que los chaqueños conocemos bien.
Del mismo modo, una representante de Pilar García consultada por este medio dijo que “habíamos hablado con la empresa (por Vía Médano) y nos dijeron que estaba solucionado”, y que por esa razón había dado por concluida la gestión, la cuestión sin embargo no estuvo remediada en los términos de lo contratado, por lo que nuevamente esta operadora ubicada en la avenida Sarmiento realizó nuevas gestiones y por la noche afirmaron que en el día de hoy estaría corregida y hoy estas pasajeras serían reubicadas “en una habitación con vista al mar, para ser resarcidas por el inconveniente”.
El micro había llegado a las 2 de la tarde, y recién a las 9 de la noche uno de los “coordinadores” de la empresa Vía Médano se apersonó para aclarar que había que agarrar eso o pagar “de nuevo” y contratar allí mismo lo que ya se había pagado en el Chaco. Claro, se negaban a devolver el dinero que habían embolsado antes y prometieron “en el aire” de que al regreso serían reembolsados los gastos que se sufragaron de más.
También anoche las pasajeras que habían hecho el reclamo confirmaron que un coordinador se había acercado a ellas para informarles que serían reubicadas en el día de hoy.
Los organismos de control no se inmutan por ahora. Los servicios de las empresas de turismo están regulados en la Argentina, pero estos recurrentes hechos no sirven para que se tomen cartas en el asunto a modo de prevención, pese a que se repiten todos los años. La queja de los pasajeros servirá, en todo caso para que en el inicio de la temporada otros desprevenidos turistas -que trabajan todo el año para tomarse vacaciones- no pasen por lo mismo. PRIMERA LINEA