Metalúrgicos llevó a la paritaria un pedido de aumento del 30 por ciento, en un pago
Las negociaciones entre empresarios y gremialistas pasaron a un cuarto intermedio, luego de que las partes no llegaran a un entendimiento en la reunión llevada a cabo en el Ministerio de Trabajo.
Fuentes sindicales indicaron que las cámaras empresarias realizaron una oferta de aumento salarial del 24 por ciento anual, que los representantes de la UOM consideraron "insuficiente".
El secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Antonio Caló, está exigiendo a las empresas del sector un aumento salarial del 30 por ciento en un pago más cuatro sumas extra hasta enero próximo.
La paritaria se inició formalmente este miércoles a las 15 en el ministerio de Trabajo que conduce Carlos Tomada, con una reunión entre la UOM y las seis cámaras patronales del sector: CAMINA, AFAC, ADIMRA, FEDEHOGAR, AFARTE y CAIAMA.
Al sentarse a la mesa con empresarios en una reunión informal, Caló pidió 30 por ciento en un pago más un plus de 1.000 pesos para este mes y una suma igual para abril, otras dos sumas de 900 pesos para noviembre y enero de 2015, así como elevar el piso de 5.000 a 6.500 pesos.
El objetivo de la UOM es que las empresas depositen el aumento en un solo pago con el sueldo de abril, aunque un ala más flexible del gremio reconoció que eso podría comprometer la salud financiera de muchas pequeñas y medias industrias y pondría en jaque puestos de empleo.
Por ello, surgió una iniciativa secundaria que propone a los empresarios un incremento del 20 por ciento en abril y otro 10 por ciento acumulativo en julio, lo que significa una suba total del 32 por ciento hacia mediados de año.
Ni bien trascendió el pedido de Caló, encendieron alarmas en el Palacio de Hacienda y en la Casa Rosada donde ya que la propia jefa de Estado había anticipado al metalúrgico el 11 de febrero último en una reunión que no convalidaría reclamos que estén muy por encima del 25 por ciento.
El problema, según analizan en el Gobierno, es que si la UOM consigue un aumento que se ubique por encima del 25 o 26 por ciento, sería un caso testigo para decenas de gremios que saldrán por un reclamo similar justo cuando desde Hacienda intentan que se equilibre la relación de los costos, precios y salarios.