Venezuela: los dueños de inmuebles deberán venderlos a sus inquilinos
El gobierno de Nicolás Maduro decretó que los propietarios de viviendas alquiladas hace 20 años o más deberán vendarlas a sus arrendatarios en un plazo perentorio de 60 días o afrontar fuertes multas.
El decreto del Ministerio de Vivienda advierte que la multa inicial será 254 mil bolívares, es decir 40.317 dólares, que debe ser pagada en un lapso de cinco días.
La multa será doblada si no se paga en ese lapso y, tras ello, de mantenerse la mora, "la Superintendencia Nacional de Arrendamiento de Vivienda solicitará el embargo ejecutivo correspondiente sobre el inmueble o inmuebles objeto de la multa", señala.
En una primera reacción, el presidente de la Asociación de Propietarios de Inmuebles Urbanos (Apiur), Roberto Orta, calificó a la norma de "inconstitucional".
En este sentido, dijo que se trata de una medida que "despoja de su propiedad" a dueños legítimos, pese a que la Constitución solo prevé la expropiación o la confiscación, con el respectivo pago de una indemnización.
Además, explicó que "muchos de estos edificios los ocupan personas de la tercera edad", a quienes la banca no los considera a la hora de otorgar créditos.
El gobierno del presidente Nicolás Maduro, adicionalmente, aún no fija los nuevos valores por metro cuadrado de construcción que deben reconocer el índice inflacionario, que en 2013 fue de 56,2 %, agregó el titular de Apiur.
Vale recordar que el fallecido presidente Hugo Chávez lanzó en 2011 la Gran Misión Vivienda, un programa para hacer frente al déficit de inmuebles que sufre Venezuela y que, según cifras oficiales, afecta a 3,7 millones de jefes de familia carentes de hogar o con viviendas que requieren ser habilitadas.
El plan se apoya en la firma de diversos convenios con una decena de países, entre ellos, Rusia, China, Uruguay y Bielorrusia, y hasta mediados de 2013 el Gobierno informó de la entrega de 415.218 viviendas en todo el país.