Cristina modificó la cúpula de Inteligencia y regresa Aníbal Fernández al Gabinete
La presidenta Cristina Kirchner desplazó ayer a la cúpula de la Secretaría de Inteligencia y designó al frente de esa área a Oscar Parrilli, quien a su vez será reemplazado como secretario general de la Presidencia por el senador Aníbal Fernández, que volverá al Gabinete nacional
En una ceremonia en el tradicional Salón Blanco de la Casa Rosada, la mandataria le tomó juramento a Parrilli en su nuevo cargo bajo la fórmula ‘por Dios, por la Patria y por los Santos Evangelios’, acompañada por el Gabinete en pleno, el vicepresidente Amado Boudou y el hasta hoy jefe de la SI (ex SIDE), Héctor Icazuriaga, quien se despidió afectuosamente de la mandataria con un abrazo.
El recambio se produjo a raíz de la disconformidad de la mandataria respecto del funcionamiento de la Secretaría de Inteligencia, por lo que les pidió la renuncia a Icazuriaga y al subsecretario del área, Francisco Larcher, y designó allí a Parrilli, un hombre de su extrema confianza que forma parte de la gestión kirchnerista desde el primer día.
El encargo de anunciar los cambios en el Gabinete fue el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, quien informó las salidas Icazuriaga y Larcher y confirmó sendos reemplazos por Parrilli y por Juan Martín Mena, quien se desempeñaba como jefe de Gabinete del Ministerio de Justicia.
En una conferencia de prensa en la Casa Rosada, sin preguntas y sin brindar detalles sobre los motivos de los cambios, Scoccimarro también informó que la Presidenta le tomará juramento el jueves a las 20.30 como nuevo secretario general de la Presidencia a Aníbal Fernández, quien tras conocer la noticia confirmó que renunciará a su banca en el Senado, a la que había accedido en 2011.
Por ello, el exjefe de Gabinete y actual embajador en el Mercosur, Juan Manuel Abal Medina, debería completar el mandato de Aníbal Fernández hasta 2017, aunque la fecha de su asunción aún no estaba confirmada y podría quedar para el año próximo.
Tras manifestar la ‘sorpresa’ y ‘satisfacción’ que le produjo el ofrecimiento, Fernández recordó que ya se desempeñó en ese cargo en 2002, bajo el Gobierno del entonces presidente Eduardo Duhalde, y agregó: ‘Me place que la Presidenta confíe en mí’.‘Sí, renuncio. Los hombres hacemos las cosas como corresponden’, sostuvo Fernández en declaraciones a la prensa acreditada en el Senado y agregó: ‘No puedo estar especulando con una licencia, nunca lo hice’.
Según pudo saber NA, este martes la Presidenta convocó de urgencia a Parrilli a la quinta de Olivos, donde -con las renuncias presentadas y aceptadas de Icazuriaga y Larcher- le confirmó al funcionario que su nueva misión será conducir la SI, que tiene sus oficinas en 25 de Mayo 11.
De esta manera, Aníbal Fernández volverá al Gabinete nacional, en el que fue secretario general de la Presidencia y ministro de Producción, durante la Presidencia de Eduardo Duhalde, en 2002; ministro del Interior, durante la Presidencia de Néstor Kirchner, entre 2003 y 2007, y ministro de Justicia y jefe de Gabinete durante la primera Presidencia de Cristina Kirchner, entre 2007 y 2011, cuando dejó el Poder Ejecutivo y asumió como senador nacional.
Cambios en el área más sensible
Por Gabriel Profiti, especial NA
Oscar Parrilli, director de orquesta de los grandes eventos oficiales y fiel servidor presidencial desde 2003, tendrá a partir de ahora una tarea mucho más sensible al frente de la Secretaría de Inteligencia, en un campo en el que Cristina Kirchner perdió total confianza: el de los espías. Parrilli pasa a encabezar un organismo siempre vinculado subterráneamente a los tribunales federales, que acumula acusaciones de ocuparse de inteligencia ‘interna’ y maneja presupuestos millonarios sin rendir cuentas.
Ese cargo lo ocupó durante once años Héctor Icazuriaga, un santacruceño conocido como ‘señor 5’, pero que según fuentes vinculadas al Gobierno no tenía control sobre los espías.
El manejo de la Secretaría estaba a cargo del número dos de la SI, ex Side, Francisco Larcher, quien pese a haber estado cerca de Néstor Kirchner termina fuera del organismo con acusaciones de haber jugado cartas para Sergio Massa.Según se afirma dentro de las filas del Frente para la Victoria, Larcher le garantizó a la Presidenta que Massa no sería candidato a diputado el año pasado.
El resultado es conocido: no solo se postuló, sino que ganó las elecciones en Buenos Aires y sepultó cualquier intento re-reeleccionista.Ahora señalan que Larcher junto a la línea histórica de agentes de la SI estaría operando contra el Gobierno en la Justicia.
De acuerdo con las fuentes, Icazuriaga y Larcher debían mantener vínculo y supervisión sobre los jueces federales, a fin de evitar dolores de cabeza a la Casa Rosada. Para ello recurrieron a Javier Fernández, auditor general de la Nación, y a quien se lo bautizó como ‘operador K en tribunales’.
En círculos judiciales se señala que Fernández también pasó a estar bajo sospecha de jugar sus cartas contra el Gobierno junto al abogado Darío Richarte, quien a su vez fue subsecretario de Inteligencia y socio de Diego Pirota en la defensa de funcionarios, entre ellos Amado Boudou. Pese a que no hay una vinculación oficial o directa, lo cierto es que esta pérdida de influencia del Ejecutivo en los tribunales federales coincidió con decisiones judiciales contrarias al Gobierno como las que tomó últimamente el juez Claudio Bonadío.
A partir de esa desconfianza acumulada, Cristina Kirchner primero asignó más atribuciones y presupuesto al general César Milani, a quien nombró jefe del Ejército y lo mantuvo al frente del área de Inteligencia Militar, pese a las acusaciones por presuntos delitos de lesa humanidad durante la dictadura.
Y antes de cambiar la cúpula de la SI, la Presidenta había dado señales públicas de su desconfianza. El mismo día en que acusó públicamente a Juan Carlos Fábrega de dar información privilegiada a bancos, con lo que determinó su alejamiento del Banco Central, cuestionó veladamente a la SI por no haberle avisado de la amenazas que sufrió por parte del grupo ISIS.
Nuevos hombres e internas
El trabajo de enlace que venía haciendo Fernández fue repartido entre otros operadores kirchneristas, entre los que se encuentra Juan Martín Mena, desde ahora número dos de Parrilli en la SI.Mena se venía desempeñando como subsecretario de Política Criminal y jefe de Gabinete del Ministerio de Justicia, cargo al que fue ascendido luego de que su antecesor, Alejandro Slokar, fue nombrado juez de la Cámara de Casación Penal.
El nuevo subsecretario de Inteligencia es un jurista marplatense ‘muy capaz’, según lo definen en el Gobierno, ligado a Raúl Zaffaroni, que respondería al secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini. También tiene buena relación con el Ministro de Justicia, Julio Alak y con el número dos de este, Julián lvarez. Los cambios seguirían con la línea operativa de la Secretaría.
Sucede que debajo de la cúpula de la SI hay internas fuertes que se van conociendo en grajeas a través de los medios. El asesinato de ‘el Lauchón’, un agente con 36 años en la Secretaría ocurrida el año pasado a manos del Grupo Halcón, también forma parte de este entramado secreto y sensible que inquieta a la Presidenta