El grupo Caesar’s Entertainment anunció que su principal división, propietaria del célebre casino de Las Vegas, se acogerá a la ley estadounidense de quiebras para seguir operando a resguardo de sus acreedores, en el marco de un plan de restructuración dirigido a “reducir significativamente la deuda a largo plazo y el pago de intereses anuales”
El plan del grupo fue aprobado por el 80% de los acreedores preferenciales, los primeros que serían remunerados en caso de liquidación.
La operación no afectará inmediatamente la actividad del grupo, que seguirá acogiendo con normalidad a jugadores y espectáculos en sus locales. Con el plan anunciado, la empresa espera reducir su deuda de 10.000 millones de dólares actuales a 8.600 millones, y disminuir de paso el coste de los intereses anuales de esa deuda en un 75%, de 1.700 millones de dólares a 450 millones.
Creado en 1937 en Reno, Nevada, Caesar’s Entertainment fue absorbido en 2008 por los fondos Apollo y TPG en 2008. Desde entonces, su actividad disminuyó tras el estallido de la crisis financiera de 2008, que afectó los bolsillos de los jugadores estadounidenses.
Sus casinos en Atlantic City también sufrieron porque la ciudad perdió su monopolio de juegos de azar en la costa este de Estados Unidos. Asimismo, el grupo no logró obtener una licencia para operar en Macao, China, la capital mundial de los casinos.