Se proyectará el 3º episodio de la serie Black Mirror
Iniciando una nueva temática, este viernes 5, a las 21, se proyectará en la Fundación El Fogón de los Arrieros el 3º episodio de la aclamada serie de televisión británica Black Mirror. La serie es una de las más notables muestras del gran momento que viven las series de ficción en diferentes partes del mundo.
Black Mirror se destaca por ser sencillamente impactante, cínica e implacable en su retrato de un mundo contemporáneo en el cual las relaciones humanas están siendo totalmente reconfiguradas por la irrupción de la tecnología. Está concebida en capítulos independientes que poseen un denominador común: abordan nuestra relación como sociedad con las nuevas tecnologías y nos presentan escenarios en los que "podemos estar viviendo dentro de 10 minutos si somos un poco torpes", en palabras de su creador, Charlie Brooker. Tan corta como intensa, Black Mirror es uno de los faros de la calidad televisiva británica y una de las series con más capacidad para hacernos reflexionar. Palabras como Apple, Google, Facebook o Twitter forman parte de nuestras conversaciones cotidianas. Y gran parte de nuestra vida está organizada alrededor de pantallas de plasma, smartphones, tablets o monitores de ordenador. Pero ¿cuáles son los efectos secundarios de toda esta tecnología y todos estos "espejos negros" tan presentes en nuestro día a día? El mundo tal y como lo conocemos está cambiando y Black Mirror es el reflejo de esta mutación.
EL CAPITULO DEL DÍA El capítulo que veremos en el Fogón se llama The Entire History of You. La acción se desarrolla en una sociedad como la nuestra pero con una única diferencia: los seres humanos llevan implantados unos chips que permiten almacenar absolutamente todo lo que la vista y el oído captan. De esta forma, uno es capaz de reproducir en sus pupilas, o en un televisor para otros, los mejores momentos de su vida, siendo posible recordar cada mínimo detalle de lo vivido. Sin embargo, lo que pudiera parecer una gran ventaja en un principio, torna en un martirio para el protagonista cuando llega a la cena de viejos amigos de su esposa. Así, este tercer y último capítulo reflexiona sobre una sociedad en la que olvidar es imposible. Al finalizar el debate, conducido por Arturo Fabiani, continuará la velada con algún platillo preparado por los amigos del Fogón.