En un país dependiente como el nuestro, somos las menos soberanas
Miércoles, 9 de marzo de 2022
8M: el documento completo
En una amplia convocatoria en la ciudad de Resistencia, en el marco del Paro Internacional de Mujeres, la organización MuMaLa (Mujeres de la Matria Latinoamericana), junto a Barrios de Pie, Movimiento Sur, el instituto Isepci, el partido Libres del Sur; y autoconvocadas, se movilizaron desde la Plaza España hasta la Plaza 25 de Mayo en donde se realizó la lectura de un documento frente a Casa de Gobierno.
EL DOCUMENTO
El pueblo, la nación argentina y nuestra provincia están pasando un momento muy grave. Al crecimiento del hambre, la desocupación, la quiebra de la industria nacional y las pymes -a la que nos llevó la política de Mauricio Macri y Juntos por el Cambio-, se le sumó la pandemia, la inflación, el aumento de la energía, los incendios, las sequías, los bajos salarios, la falta de agua, tierra, techo, trabajo, salud, educación, en un contexto de invasión y guerra.
Los femicidios, transfemicidios, abusos sexuales en las infancias, las violaciones en grupo, violencias de género en todos los ámbitos en que se desarrollan las mujeres y femineidades, siguen siendo moneda corriente y se profundizan.
En estas circunstancias, el gobierno pretende aprobar en el Congreso un acuerdo para pagarle al FMI la deuda de 44 mil millones de dólares que contrajo el gobierno de Macri y Juntos por el Cambio.
Esta deuda es una gran estafa, el préstamo más grande en la historia del Fondo, para que el macrismo los fugue a través de sus Bancos amigos. Ni un solo dólar fue usado para beneficiar al pueblo argentino. El propio Macri confesó: “La plata del FMI la usamos para pagar a los bancos que se querían ir”.
El presidente Fernández dijo en el Congreso que esta deuda era “la mayor administración fraudulenta y la mayor malversación de caudales que nuestra memoria registra”.
Con la firma del acuerdo con el FMI, se estaría legitimando una deuda que en realidad es una estafa y en vez de pagarla los que se la fugaron, se decide cargar, durante más de una década, una enorme y odiosa mochila sobre las espaldas del pueblo.
Con revisiones cada 3 meses de una comitiva extranjera, violan nuestra soberanía e imponen la reducción del déficit fiscal, lo que significará más ajuste para el pueblo que recaerá sobre todo en los cuerpos y las vidas de las mujeres y disidencias, infancias y ancianidades, fortaleciendo a los sectores reaccionarios que quieren volver al gobierno.
Alberto Fernández equivoca el camino, por subordinarse a los aprietes del Fondo Monetario Internacional, y por buscar diversificar la dependencia multilateral, como expresó en su viaje a Rusia y China.
Nuestro camino debe ser independiente de todas las potencias que se disputan el mundo y un ejemplo de la necesidad de ello es la invasión desatada en Ucrania.
Muchos diputados y senadores nacionales sienten la presión de aprobar este acuerdo aún en contra de su voluntad, haciendo crecer su descontento, mientras enfermeras, docentes, empleadas domésticas y otros rubros de cuidado, a los que mayormente pertenecemos las mujeres y femineidades, percibimos los sueldos más bajos.
La inflación como herramienta de ajuste de salarios es la que predomina en este momento en la Argentina, que junto con medidas de flexibilización laboral que avanzaron en los últimos años, todo el pueblo trabajador se ve perjudicado, y la brecha de género se agudiza.
Según el INDEC, entre las personas ocupadas, cada $100 que gana en promedio un varón, una mujer gana $79, las tasas de desocupación y subocupación son más grandes para nosotras que para ellos.
También según INDEC, en el sector de la salud y de los servicios sociales, el 70% de personas ocupadas son mujeres. Los recortes a través de la inflación y ajustes presupuestarios en las carteras de salud y educación nos afectan directamente como trabajadoras de estas áreas.
Además estos recortes nos afectan a todas de una manera particular en nuestros hogares. Las familias se ven obligadas a endeudarse para pagar los útiles, los jardines, los remedios, el alquiler. Así ante la reducción del rol del Estado en la provisión de servicios básicos, los hogares recurren al endeudamiento privado para acceder a los mismos.
En definitiva, para pagar al FMI la estafa de Macri, nos endeudamos nosotras con bancos, tarjetas de crédito, familia, prestamistas.
La profundización de un modelo agroexportador y extractivista, donde la riqueza de nuestro suelo, subsuelo y aguas son el tesoro que ven los imperialismos para llevarse divisas, trae aparejado, además de la destrucción del ambiente que habitamos, escasez de fuentes de trabajo, desempleo y la explotación de nuestros cuerpos.
Los proyectos de Ley de Megaminería en Chubut, de Extracción de Petróleo con Fracking, la licitación de la Hidro vía del Paraná, así como los incendios y la negativa a la Ley de Humedales, apuntan a profundizar este modelo, un rumbo que debemos cambiar con debate y protagonismo popular.
La producción para vender materia prima y comprar productos industrializados necesita de la deforestación salvaje de nuestro suelo, profundizando los lazos de dependencia con países imperialistas, generando altas temperaturas, sequías y desastres en la naturaleza.
Este verano tuvimos picos de 48 grados de calor, ¡la más alta temperatura en 62 años! mientras respiramos el humo de nuestra hermana provincia correntina, azotada por los incendios. ¡¡No es calor, es desmonte!!
Exigimos un ambiente apto para el desarrollo de una vida digna de nuestro presente y futuro. Necesitamos una Ley de Emergencia Ambiental que proteja los humedales e incorpore el abordaje de los incendios y la sequía. ¡Ni la tierra ni nuestros cuerpos son territorios de conquista!
En este marco, la brecha salarial, los acosos laborales, la violencia institucional, la dependencia económica, la desvalorización de los trabajos domésticos y tareas de cuidado en una sociedad patriarcal, fortalecen los estereotipos y las violencias de género. Se agudizan las violencias en las mujeres de los Pueblos Originarios, triplemente oprimidas, por ser pobres, por ser mujeres y por ser originarias.
Los presupuestos y las políticas para atenuar las violencias por razones de género, seguirán atendiendo las emergencias siempre que haya un movimiento de mujeres que impulse la lucha y el Estado seguirá llegando tarde si no se transforman estas cuestiones de fondo.
Según el observatorio “Ahora que sí nos ven” en 2021 hubo 256 femicidios, uno cada 34 horas en el país, 12 de ellos fueron en el Chaco.
Cerramos el 2021 con la triste noticia del femicidio de Soledad Sotelo, una hermana de lucha, asesinada por Maximiliano Quiroz ¡exigimos justicia!
Comenzamos el 2022 con 54 femicidios en 2 meses, uno cada 26 horas.
Por todo esto hoy gritamos: ¡Si nuestras vidas no valen, produzcan sin nosotras!
*A 40 años de la gesta por la recuperación de Malvinas, reivindicamos la lucha en defensa de la soberanía ¡FUERA INGLESES DE MALVINAS! ¡FUERA TODOS LOS IMPERIALISMOS DE LA ARGENTINA! ¡LAS MALVINAS SON Y SERÁN ARGENTINAS!
Seguimos exigiendo salario igual a la canasta familiar e igual salario por igual trabajo. Basta de precarización laboral. Aumento de planes en cantidad y montos hasta que exista el trabajo genuino con el desarrollo de la industria nacional.
Presupuesto para el acceso y permanencia en la educación en todos sus niveles. Solicitamos la anulación del decreto 2633 del Gobernador y la Resolución 967 del Ministerio de Educación que plantea una ESI alternativa, respondiendo a demandas de sectores fundamentalistas y no a la Ley Nacional de Educación Sexual Integral 26150. Plena implementación de la ESI en todo el sistema educativo. Aplicación de la Ley Micaela para que sobre todo funcionarios se formen en perspectiva de género y que ésta se plasme en políticas públicas.
Queremos que los y las funcionarias de las universidades dejen de reconocer al feminismo solo a nivel discursivo y administrativo, con un “Protocolo ante situaciones de discriminación y violencia de género” insuficiente, sin mecanismos reales de funcionamiento y que no contempla sucesos en contexto de enseñanza virtual. Con el 80% de mujeres en los cargos más bajos de la docencia, a pesar de tener una planta docente altamente feminizada, precarización que significa asumir tareas que exceden en tiempo y responsabilidad a las competencias del cargo, e incluso no acceder a derechos logrados por los gremios, como el de licencia por cuidado de personas menores o adultas mayores a cargo.
Apoyo a la producción agrícola y artesanal de pequeñas y medianas productoras campesinas e indígenas.
Exigimos que se impugne el ingreso de Raúl Acosta como legislador suplente, imputado por abuso sexual con acceso carnal.
Exigimos que todos los funcionarios públicos denunciados por violencia de género, sobre todo por delitos contra la integridad sexual de las mujeres, sean suspendidos de sus funciones y se los investigue con celeridad, por tratarse de personas de responsabilidad política institucional.
Exigimos que ningún municipio nos cierre las puertas, como lo hizo el intendente de Resistencia, Gustavo Martínez. Exigimos un Plan de acción Inter poderes con presupuesto acorde a las demandas. Exigimos un cupo laboral para mujeres originarias y que se cumpla el cupo laboral trans.
¡¡La deuda es con nosotras y nosotres!!
Nos deben la emergencia en violencia contra las mujeres. Nos deben un mejor salario. Nos deben los anticonceptivos. Nos deben la salud.
Nos deben la comida. Nos deben la tierra. Nos deben el desmantelamiento de las redes de trata.
Nos deben las instituciones de cuidado de niñes, enfermos y ancianos. Nos deben nuestros momentos de ocio. Nos deben nuestros ríos. Nos deben las Malvinas.
Nos deben una justicia con perspectiva de género. Nos deben justicia. Nos deben a Yanina Sequeira y Soledad Sotelo, Nos deben a Dominga Arias y Marilú Robledo,
A Fabiola Ramirez, Sandra Fleita y María Madgalena Nos deben a Agustina, Nos deben la vida.
Nos deben la independencia…Porque en un país dependiente como el nuestro, somos las menos soberanas.
¡¡No al acuerdo con el FMI!! ¡¡Las deudas se pagan, las estafas no!!