Los libertarios barrieron a Zdero en redes y se adueñaron del “triunfo” en el Chaco
Varios referentes mileiístas en X festejaron la victoria de Chaco Puede como propio. Aseguraron que la provincia se tiñó de morado y ni lo nombraron al gobernador. A nivel local ya abren el paraguas por la intromisión porteña…
En un escenario electoral marcado por la baja participación (52%) y un empate técnico con el peronismo fragmentado, el triunfo ajustado del oficialismo chaqueño liderado por el gobernador Leandro Zdero derivó en una especie de puja por el relato y, más importante aún, por quién es el padre de la criatura.
Desde Buenos Aires, referentes libertarios ligados al presidente Javier Milei —incluidos funcionarios de su gobierno— se adjudicaron el resultado como una victoria propia, y ¿despertando recelos en el entorno de Zdero?.
Cerca del mandatario, que se adjudicó el triunfo como una ratificación a su figura, observan con distancia y preocupación cómo La Libertad Avanza (LLA) busca ampliar su influencia en un territorio históricamente ajeno al liberalismo.
La alianza entre Zdero y LLA, sellada meses atrás, permitió que dos candidatos libertarios —Adrián "Junior" Zukiewicz y Mayra "Pili" Jarenko— ingresaran a la Legislatura. Sin embargo, el resultado global desnuda una realidad menos triunfalista: el espacio zderista-mileísta obtuvo 109 mil votos menos que en las elecciones de 2023, cuando ambas fuerzas compitieron por separado. Así las cosas, el resultado de ayer responde más a la continuidad del voto de confianza a Zdero —ratificado en 2022— que a un respaldo al proyecto nacional de Milei.
Sin embargo, figuras como Iñaki Gutiérrez, funcionario de Comunicación del Gobierno nacional, tildaron el resultado de "contundente" y lo vincularon al "avance de las ideas de libertad". Desde redes sociales, cuentas afines a Milei inundaron las plataformas con consignas que daban cuenta que la provincia se tiñó de morado, omitiendo que el mandatario local pertenece al radicalismo
El temor a la "porteñización"
En el oficialismo provincial crece la inquietud ante lo que algunos internamente advierten como un avance libertario, especialmente de cara a la conformación de las listas para las legislativas nacionales de octubre próximo.
Hay preocupación, lisa y llanamente, por que Javier y su hermana Karina —figura clave en la toma de decisiones— utilicen la estructura comunicacional del Estado para imponer una agenda ajena a los intereses locales y que les terminen de rodear la manzana con nombres puestos a dedo.
El temor es quedar directamente a merced de la maquinaria libertaria en redes, quizá lo más aceitado que tengan los Milei. El riesgo no es menor: el gobierno nacional controla una red de voceros e influencers que, en horas clave, pueden inclinar la opinión pública. Además, la baja votación libertaria en la provincia (apenas dos legisladores contra los 15 del radicalismo alineado con Zdero) no se condice con la narrativa de "ola libertaria" impulsada desde la Rosada, lo que para algunos expertos refleja una estrategia de expansión territorial simbólica.
Aunque públicamente Zdero agradeció el apoyo de LLA, fuentes cercanas a él adelantan que el gobernador buscará delimitar roles de aquí en más, aunque siendo cuidado con los tiempos y las formas.
Otro punto de conflicto es que cerca del mandatario ven cómo el peronismo podría sacar jugo de las piedras ante disputas entre el radicalismo y los libertarios ya que, según entienden algunos, el desgaste podría incrementarse en los meses venideros.
Por todo esto y en un país donde la política se juega tanto en las urnas como en el algoritmo de X, el Chaco se convierte en el primer laboratorio de una tensión que podría repetirse en otras provincias: la lucha por el relato entre un presidente que necesita victorias y un gobernador que no piensa ceder su territorio.