“El docente elige hacer dedo”: el desafortunado mensaje de la ministra Naidenoff a un año del crimen de Erica Torres
La titular de la cartera educativa volvió a minimizar el esfuerzo que día a día hacen miles de maestras que salen a la ruta a apelar a la solidaridad de desconocidos para llegar a sus lugares de trabajo. Y todo al cumplirse el primer aniversario del asesinato de la docente de Charata…
A pocos días de cumplirse un año del brutal crimen de la maestra Érica Beatriz Torres, violada y asesinada cuando hacía dedo para ir a trabajar, la ministra de Educación, Sofía Naidenoff, recayó en un desafortunado comentario.
Los dichos de la funcionaria toman otra dimensión si se toma en cuenta que es una de las integrantes de la “pyme familiar” que “tomó” el Estado provincial y se lleva todos los meses millones y millones de fondos públicos en sueldos.
“El docente elige hacer dedo”, sostuvo la ministra del gobierno de Leandro Zdero al intentar argumentar que los trabajadores de la educación recurren a salir a las rutas a pedir un aventón a desconocidos para mejorar su situación laboral.
Otro punto que quizá pasó por alto: su jefe, el gobernador, había prometido en campaña que se terminarían las escenas de guardapolvos a la vera de las rutas chaqueñas. No solo que no cumplió, sino que una propia funcionaria suya reavivó la problemática.
Las declaraciones de Naidenoff no pudieron caer en peor momento: el 26 de mayo se cumple el primer aniversario del asesinato de Torres, una maestra de 46 años que todos los días tenía que apelar a la solidaridad para poder llegar a la escuela en la que enseñaba.
Al hacer dedo en la ruta 89 en la zona de Las Breñas para cubrir los 14 kilómetros que le faltaban, la mujer fue atacada por el hombre que accedió a llevarla en una camioneta Ford F-100. Este individuo, con antecedentes por abuso sexual, intentó violarla y la mató. Érica fue encontrada agonizando por un camionero en un camino rural. Este terrible suceso subraya que "hacer dedo" para un docente en el Chaco no es simplemente una elección de conveniencia laboral, sino a menudo una necesidad impuesta por las condiciones de transporte y la búsqueda de empleo, una práctica que conlleva un riesgo real y potencialmente fatal.
"El docente elige hacer dedo porque lo que pasa es que necesita o quiere un cargo que está en otro lugar", contestó este jueves Naidenoff ante una pregunta en Alerta Urbana, en Radio Gualamba. "Hay lugares donde el docente quiere ir porque, lógicamente, a veces se cobra más”, agregó la funcionaria de Zdero.
El comentario contrasta brutalmente con el caso de Érica pero también con el de miles de maestras -tal como lo reconoce la propia ministra- que día a día recurren a un aventón de parte de automovilistas, camioneros o hasta motociclistas que circulan por las rutas de la provincia.
👮 Este domingo los efectivos de la Comisaria Las Breñas procedieron al #secuestro de una #navaja plegable, de 14 cm; por ser interés en la causa.
¿Las maestras realmente eligen salir a la ruta a pedir ayuda a desconocidos?
El hecho de que una docente, para poder cumplir con su labor, deba exponerse a la incertidumbre y el peligro de subir al vehículo de un desconocido en la ruta, cuestiona la idea de "elección". ¿Es realmente una elección libre y voluntaria cuando las alternativas de transporte público son insuficientes o inexistentes para acceder a los puestos de trabajo disponibles?.
si bien la ministra puede ver el pedir un aventón como una "elección" ligada a la búsqueda de mejores oportunidades laborales, la trágica muerte de Érica Torrez y las reconocidas deficiencias en el transporte para acceder a los puestos de trabajo, sumado al contexto general de riesgos delictivos, sugieren que para muchos docentes, "hacer dedo" es una estrategia de supervivencia laboral ante la falta de alternativas viables y seguras.
Minimizar esta práctica a una simple "elección" desatiende las condiciones estructurales que llevan a los docentes a exponerse a tales peligros, poniendo el foco en la decisión individual en lugar de las responsabilidades del sistema en garantizar condiciones laborales y de transporte seguras. Abordar las causas profundas que obligan a un educador a recurrir a ayudas de extraños debería ser una prioridad ineludible para las autoridades educativas y de transporte de la provincia.
Naidenoff SA
Naidenoff y su entorno familiar y cercano se pusieron en el centro de un escándalo por la creación de una red de cargos públicos decorativos financiada con fondos provinciales. Familiares directos, amigos íntimos y allegados ocupan puestos en el Estado con sueldos que superan ampliamente los ingresos de trabajadores esenciales, como docentes o enfermeros.
Esta estructura, denominada irónicamente "Naidenoff S.A.", le cuesta a los chaqueños más de 370 millones de pesos anuales en sueldos y aguinaldos, según revela el artículo. El gobernador Leandro Zdero, quien promueve públicamente la austeridad fiscal, no ha intervenido para frenar estos privilegios.
Entre los beneficiarios destacan Luis C. Naidenoff (exsenador radical, con 85,9 millones de pesos anuales), Sofía Naidenoff (52 millones como ministra) y otros familiares y amigos como los Kaluk y Noel Ibarra, cuyos sueldos suman 307,6 millones al año. A esto se suma la jubilación de privilegio del intendente Roy Nikisch, que cobra 66,8 millones anuales. En total, la red absorbe 374,4 millones de pesos provinciales, mientras escuelas y servicios públicos sufren carencias crónicas y los trabajadores estatales perciben salarios mínimos.
El artículo contrasta esta situación con la realidad económica chaqueña: un déficit fiscal de 200.000 millones de pesos, tarifas que aumentaron hasta un 700% y un transporte público con incrementos del 1.300%. Mientras la provincia se endeuda y la población enfrenta dificultades, la familia Naidenoff y sus aliados acumulan ingresos millonarios desde cargos públicos sin funciones claras. La crítica apunta a la hipocresía de un gobierno que exige ajustes a la ciudadanía, pero mantiene una estructura de gasto opaca y privilegiada para sus círculos internos.