La Escuela de Verano en el Chaco, es un ejemplo que fortalece el derecho a la educación
El ministro de Educación Sergio Soto, presidió este martes el cierre de Escuela de Verano 2013 desde la Escuela de Educación Primaria (EEP) Nº 319 “Juan Manuel Rossi” de Resistencia.
El ministro de Educación Sergio Soto, presidió este martes el cierre de Escuela de Verano 2013 desde la Escuela de Educación Primaria (EEP) Nº 319 “Juan Manuel Rossi” de Resistencia. El acto reunió a nueve comunidades educativas que se convocaron para mostrar las buenas prácticas educativas logradas durante las vacaciones, en pleno receso escolar.
Acompañaron el acto, el subsecretario de Educación, Daniel Farías, las directoras generales de Gestión Educativa, Vivian Polini y de Niveles y Modalidades, Irma Bosco; la presidenta del Consejo de Educación, Griselda Galeano, la directora de la escuela anfitriona, Anita Katz; directores de todos los niveles y modalidades educativos y los directores de las regionales educativas 3, José López y, de la 8, Mónica Von Sieventhal.
Para el cierre se reunieron en la escuela anfitriona alumnos, docentes y padres de las Escuelas Primarias Nº 1026; 1076; 577; 626; 1049; 68 y las Escuelas Públicas de Gestión Social Indígena del barrio Toba y la Escuela Pública de Gestión Social “Mate Cosido”.
“Un ejemplo en el país”
El ministro manifestó su satisfacción de los logros obtenidos. “Nosotros como provincia hemos construido una Escuela de Verano que es un ejemplo en la Argentina, porque tenemos la convicción de que el pueblo del Chaco se tiene que apropiar del derecho fundamental a la educación y ese derecho lo tenemos que honrar todos los días y en cada acto cotidiano”, expresó.
A la vez que señaló: “Nuestras comunidades se tienen que apropiar de la escuela, ya que más de la mitad de la población del Chaco, algún día tiene contacto con la escuela y ese no es un dato menor y la escuela así como tiene la concepción del refuerzo pedagógico también tiene la concepción del niño, joven o adulto como de un ser bio–psico–social capaz de generar lazos con su comunidad y eso es lo que la sociedad necesita”.
“No creo que exista un sólo trabajador de la educación que no quiera asumir el compromiso de ser protagonista, junto al Estado que es el garante, en fortalecer el ejercicio del derecho social a la educación para un pueblo que todavía padece situaciones de pobreza y exclusión, que tenemos entre todos que a ayudar a combatir y resolver”, sostuvo Soto.
“Esta experiencia da sentido a la militancia para los que menos tienen”
El subsecretario Farías destacó que esta es una experiencia que desde su primer día y hasta la fecha “da sentido a la militancia en las escuelas sobre todo para los que menos tienen”.
“Está claro que somos la mejor experiencia del país y nos enorgullece, porque estamos generando un poco más de justicia social”, afirmó Farías. Reconoció que en muchas escuelas pese a que contaron con limitaciones económicas para generar actividades, eso no fue un impedimento para realizar actividades de calidad, como paseos, garantizar el apoyo escolar, así como también visitas de personas significativas. ”Éste es nuestro logro, por lo que deseo expresar que estoy muy orgulloso de los docentes que dejan el corazón”, manifestó.
“Gracias a los docentes, a los padres que confiaron, a los niños que dieron valor a la propuesta, que sin dudas ha venido para quedarse”, concluyó Farías.
Esta propuesta pedagógica integral que se realizó en los 69 municipios de la provincia, ofreció una alternativa distinta en vacaciones a alumnos de escuelas primarias, secundarias y Bachilleratos Libres para Adultos (BLA).
Esta propuesta que vino para quedarse tiene la visión de garantizar una escuela abierta con una acción integral fortaleciendo el vínculo con la comunidad y contemplando la diversidad cultural, geográfica, étnica y lingüística para todos los alumnos del Chaco.
En las escuelas chaqueñas y por cuarto año consecutivo el Ministerio de Educación propuso espacios de lectura, prácticas de ortografía o resolución de problemas matemáticos a través de concursos o competencias; y los adultos de Bachilleratos Libres aprendieron oficios con salida laboral.
La Escuela de Verano es una alternativa válida para que las familias completas puedan entender que el proceso educativo nunca se acaba ya que está demostrado que los beneficios que han dado estos 4 años redundaron en beneficio de la calidad de vida de los alumnos, ya que fundamentalmente se trabajan valores y se mejora el rendimiento escolar.