Quedó superado episodio entre el vicegobernador y el ministro de Educación
Bacileff Ivanoff había manifestado su enojo con declaraciones adjudicadas a Romero. Éste, a su vez, emitió un documento en el que afirma que nunca contradijo a quien planteó con crudeza el alto costo del ausentismo docente.
Lo que parecía una nueva crisis, con tormenta política de por medio dentro del gabinete del gobernador Jorge Capitanich, derivó en una fresca brisa veraniega con explicaciones y fumata blanca entre los protagonistas del contrapunto.
En la víspera, poco después del mediodía, el vicegobernador Juan Carlos Bacileff Ivanoff tuvo algunas consideraciones respecto del ministro de Educación Francisco Romero, por el gasto de 400 millones de pesos anuales en licencias de los docentes, situación que llegó al extremo con un pedido de renuncia.
Bacileff manifestó a NORTE que Romero “primero dijo que el gasto era de 400 millones y luego que alcanzaba a la mitad. Tienen todo el derecho de opinar y dar sus explicaciones porque vivimos en democracia. Y está bien que esto se haya discutido. Esto se puede tomar como una crisis pero sirve para sanear. Si yo no decía lo que dije esto no se iba a blanquear”, puntualizó.
El vicegobernador recordó que todo comenzó cuando “el ministro informó las distintas situaciones que se estaban viviendo en Educación y que el gasto en licencias médicas y otras, que son mínimas, era de un 20 por ciento, mientras que en el sector privado apenas llegan al 2 por ciento, y ese ausentismo del 20 por ciento le cuesta a la provincia 400 millones de pesos al año”.
“Ahora (Romero) dice que tiene que tener diálogo con los gremios; yo también tengo diálogo con los gremios. Recuerdo que cuando dije eso hubo tres o cuatro gremios que dijeron que también había responsabilidad del gobierno porque tiene que hacer el control y eso es cierto”, apuntó.
Después argumentó: “Ocurre que yo soy vicegobernador y no tenía esta información, que recibí en esas reuniones que fueron una iniciativa del gobernador. Ahí me entero de la situación”.
“Cuando él informa que hay un gasto de 400 millones en licencias le pregunté: ¿quién hace el control médico? Y me respondió que lo hace el Ministerio de Salud. Y le pregunté: ¿por qué no se compromete e interviene el Ministerio de Educación”, insistió en marcar como un punto importante en el asunto.
Según dijo, “entonces yo le exigí que el Ministerio de Educación tenga participación a través de los directores regionales y que los certificados médicos tienen que venir rubricados por los mismos”, al relatar la discusión en el Salón Obligado en una reunión llevada a cabo la semana pasada.
Ayer el vicegobernador dijo que tras ese “seminario” Romero propuso bajar de 400 millones a menos de 100 millones el gasto en licencias médicas entre 2013 y 2015 con una serie de medidas que le aportó al gobernador y sobre las que tomó conocimiento en forma indirecta.
Aclaraciones para mantener la calma
Ante las declaraciones realizadas por Bacileff Ivanoff, Romero consideró necesario efectuar algunas aclaraciones, las que permitieron con el correr de las horas mantener la calma, hasta del propio gobernador:
“En ningún momento desdije o contradije (ni desdigo ni contradigo) lo que el vicegobernador había declarado oportunamente, en relación con las erogaciones generadas por las licencias docentes. Lo respeto por su investidura y lo estimo personalmente. Son, efectivamente, 400 millones los fondos que destina Educación en concepto de licencias. Ante una pregunta periodística radial, precisé que 200 de esos millones corresponden a lo que se consideran licencias perfectamente evitables, y que el 50 por ciento restante atañe a licencias propias de un sistema educativo muy grande y complejo, desde licencias por embarazos, por largo tratamiento, por ascenso, por concursos, tareas pasivas, entre los más frecuentes, más allá de que sobre el total de las mismas ejerceremos el contralor indispensable. Subrayé que este sistema educativo tiene más de 400 mil alumnos y casi 40 mil docentes. En ese sentido, las transcripciones periodísticas gráficas, sobre la base de la entrevista radial, incorporan, como es lógico suponer, el factor interpretativo. Sin embargo, lo aquí transcripto es tanto el contenido, la forma como el espíritu de mis declaraciones”.
El ministro sostuvo en segundo lugar que “tal como lo expuse personalmente en las reuniones de gabinete ampliado del 2 al 4 de este mes, estamos comprometidos como Ministerio a encarar, conjuntamente con Salud Pública un programa de Salud Laboral que actúe tanto en términos de prevención y atención de la Salud Docente, como así también en corregir lo atinente al uso abusivo de licencias, a través, entre otras medidas, de la visita médica domiciliaria y la puesta en marcha de un sistema estadístico centralizado on line. Por consiguiente, esperamos en este ciclo lectivo una ostensible disminución de la erogación que demandan las licencias docentes, para que su uso sea el razonable.
Además, remarca que “mencioné, tal como dijo el Vicegobernador, que en porcentaje de ausentismo representan entre el 18 y 20 por ciento, un poco por debajo de la media nacional, que nos preocupa mucho lo que esto ocasiona en términos de discontinuidad pedagógica, y que estamos trabajando como equipo de gobierno y gabinete educativo para resolver un problema que es tanto económico como pedagógico”.
Por otra parte, Romero afirma que en lo concerniente a ciertos títulos periodísticos, que plantean que el Ministro de Educación se despega de las declaraciones del Vicegobernador, como puede apreciarse de la lectura del contenido de esa nota, “no sólo que en ningún momento dije eso (como ese mismo medio lo reconoce), sino que manifesté mi respeto por las mismas, así como las de todos los actores del sistema educativo. En todo caso, argumenté que desde mi rol de ministro, mi función en esta etapa es la de hacer todos los esfuerzos por asegurar un ciclo lectivo normal, y por ende, dar continuidad al ámbito de diálogo propositivo que tenemos con los sindicatos docentes desde el 7 de diciembre. En ese contexto, es decir, el de mi específica responsabilidad, consideré y considero que no puedo ni debo generar ninguna confrontación, en aras del norte que buscamos: un ciclo lectivo con aulas abiertas todos los días, todas las horas de clases”.
Finalmente, tal como se desprende de las cuatro aclaraciones expuestas, Romero aclaro que une al Vicegobernador la misma preocupación por el destino y el sentido de la educación pública, sistema que sea tanto inclusivo, como equitativo y de calidad, tal como lo expresa frecuentemente el gobernador Capitanich al referirse a las tres grandes metas educativas.