Bellas Artes de La Plata se quedó con el Premio Desafío “Hierros Lider”
Tras 48 horas de trabajo exhaustivo finalmente se conoció este jueves por la tarde al equipo ganador del Premio Desafío “Hierros Líder”. Los estudiantes de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de la Plata se llevaron el primer galardón. En tanto, en segundo lugar quedaron los estudiantes de la Escuela Superior de Bellas Artes de Córdoba.
En un gran marco de público que se acercó hasta el escenario principal de la Bienal Internacional de Escultura, montado en el acceso al MusEUM, los estudiantes Martin Gaston Merlos Quinteros, Manuel Fernandez Tomic y Gonzalo Olivares Garcia fueron galardonados con el premio Desafío y tendrán consigo hasta 2018 una réplica de la obra “Así cantaba el Iviqué” de Mimo Eidman.
Por su parte, Leonardo Ariel Giordano, Santiago Ezequiel Tacconi y Laura Manegotto, de la Escuela Superior de Bellas Artes de Córdoba se quedaron con el segundo puesto. El jurado del concurso estuvo conformado por Paulina Web, Darío Klehr, León Saavedra Geuer y Eduardo Calandria.
“Estamos muy agradecidos a la Fundación Urunday y a todos los compañeros”, dijo un emocionado Martín Merlos Quinteros, luego de recibir el primer premio. “Nos sacrificamos 48 horas seguidas. No dormimos pero igual estamos agradecidísimos. Gracias a la vida y al universo. Estamos muy felices”, remarcó.
El acto de premiación contó con la presencia del presidente de la Fundación Urunday, Fabriciano y miembros de la Fundación. También estuvieron presentes Alejandra Boutet (coordinadora del Premio Desafío); Jorge Cura, mecenas del concurso; Fabio Zeniquel por la UNNE y Javier Cantón por la empresa Sthill.
El jurado del Premio Desafío destacó el gran nivel de los estudiantes de Bellas Artes
Darío Klehr, Paulina Webb, León Saavedra Geuer y Eduardo Calandria fueron los jurados del Premio Desafío “Hierros Líder”, en el cual participaron estudiantes de Bellas Artes de todo el país quienes esculpieron una escultura en madera en apenas 48 horas. Todos destacaron el gran nivel de los concursantes y aseguraron que es un concurso que se supera en cada edición.
“El nivel es muy bueno”, afirmó Darío Klehr. “Son chicos de las escuelas de arte que están aprendiendo así que van a aceptar las devoluciones que le vamos a hacer. Que nunca son críticas sino que son constructivas. Los chicos van a aprender de la misma manera que hemos aprendido de grandes escultores también”, indicó.
“Estos chicos van a ser el día de mañana grandes escultores que van a representar algún día a su provincia. Por eso es muy positivo que acepten las críticas constructivas para poder resolver en su próxima competencia el trabajo”, afirmó.
“He participado en varios eventos acá y este año lo veo muy bien, más trabajadores, cada vez más equipados y mejor”, señaló por su parte, Eduardo Calandria. “Aprovechando la juventud que tienen pueden mostrar mucho de lo que tienen”, aseveró.
“Lo que observamos para evaluar es la calidad del trabajo, de la madera. También la inserción de materiales, como metales. Eso es lo que ayuda a todo escultor a desarrollarse de otra forma y no solo de madera pura”, expresó.
“Para ellos es un tema sumamente difícil en 48 horas hacer una obra”, reconoció León Saavedra Geuer. “Hay que pensar y tomar en cuenta que tampoco son personas que han trabajado 20 años sino que son estudiantes que pusieron lo mejor de sus corazones”, dijo.
“El nivel de las obras es muy bueno”, dijo Paulina Webb. “Tengo mi experiencia de haber sido jurado anterior y me parece que el nivel siempre se mantiene y se supera. Estoy muy contento por lo que estoy viendo ahora”, sostuvo.
“El criterio fundamental es saber que el tema que trata este concurso es el de Equilibrium, ver los materiales que usaron, respetar lo que se puede agregar, pero personalmente miré como se resolvió el problema a partir del tronco. El atrevimiento que tuvieron con el material y el haberlo trabajado hasta las últimas consecuencias”, aseveró.