En el marco de las Jornadas Internacionales e Interdisciplinarias sobre Conflictos y Problemáticas Sociales en la Región del Gran Chaco, este jueves presentaron sus ponencias docentes e investigadores provenientes de distintas universidades del país y del exterior.
En el área de Conflictos de la Educación y enseñanza de las Ciencias Sociales, Ramón Sanz Ferramola, profesor de filosofía de la Universidad Nacional de San Luis, empezó su tesis planteando un interrogante: ¿Nuestras universidades están colonizadas? y abrió el debate acerca de qué manera enfrentar esta situación.
En primer lugar, propone pensar las ciencias sociales desde la liberación y no desde la dominación. “La ciencia debería servir para la emancipación y la liberación de la humanidad”, afirmó. Es decir, ciencia como conocimiento que beneficie a la sociedad y no sólo se quede con la comprensión y la explicación de los fenómenos.
Por otra parte, hizo un abordaje teórico en el que, enfrento dos conceptos, ciencias capitalistas y ciencias liberadoras. Sanz Ferramola pretende que las Ciencias Sociales críticas suramericanas realicen sus investigaciones desde una posición liberadora. Es decir una mirada constructivista centrada en el contexto social local destinada al avance y no al retroceso.
Existe un modelo extractivista en la educación, en el cual las universidades no someten sus planes de estudios a un análisis crítico. Es a esto lo que el docente llama “epistemicidio”, es decir, instalar saberes externos y matar los del pueblo.
Es dentro de este contexto que se produce una Acumulación por desposesión, o lo que el autor denomina “un capitalismo de rapiña”, que transforma la crisis cíclica del capitalismo en un círculo vicioso de desposesión. En este sentido, Sanz afirmó que “las universidades son cómplices, porque reciben coimas de las multinacionales para que hagan el visto bueno a esta realidad”
“Los alumnos salen con la cabeza lavada” afirmó Daniela Torrente
La directora de la carrera de Licenciatura en Economía, la profesora Daniela Torrente realizó una fuerte crítica al plan curricular actual de la carrera. En este marco presento su proyecto de actualización de contenidos que se ajustan más a la realidad a nivel local, nacional y latinoamericana. “Es necesario actualizar disciplinariamente la carrera, desde un enfoque más liberador” afirmó. En cuanto al desarrollo profesional, se deben replantear los contenidos y las materias tienen que integrar el contexto social y político del país. Con el fin de evitar que los alumnos queden limitados a una enseñanza tradicional, basada en transmitir información y no fomentar un pensamiento crítico y social. Dejar de lado el carácter utilitarista de las ciencias económicas, y sumarle una perspectiva sociológica.